Mientras tanto el señor Ebimundo Escuarzo, a quien todo el mundo conocía mejor como «la maquina de leer», leia a tiempo récord las más de mil quinientas fojas del expediente más otras documentaciones varias sobre el caso, que Cuviert le había confiado al hacerlo parte del grupo de investigación. Se enfocó profundamente en la búsqueda de alguna pista de la que nadie se hubiese percatado antes.
Encontró una inconsistencia en lo dicho por Gullivan, pues este dijo que se había dormido pese al ruido de una pava silbadora, pero en la alcaldía no tenían ni una pava de tales características según constaba en el acta de objetos, documento del que también disponía. De hecho siquiera tenían pava ordinaria, ya que un día antes el alcalde la había pedido «prestada» para su casa y según algunos testimonios calentaban agua en un jarrito de chapa, que sí aparecía en el acta de objetos.
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El Misterioso Caso del Jamón de Utherhood
Humor¡No se pierda esta tirada especial! El jamón centenario de Utherhood ha desaparecido y todos están detrás de las pistas. Personajes de maravilla y una historia que le volará el sombrero. ¡Léalo todo a 0¢ de dolar!