Halloween Fest (+21)©️✔

2. DULCES CALABAZAS 🎃

Capítulo 2.

Leah

Zahiban se levanta de la banca luego de un rato y me extiende la mano .

‐ Si ya te sientes mejor, ¿podrías guiarme hasta el lugar donde venderán las tartas de calabazas?, en verdad quiero probarlas.

Oh claro, las tartas, ya se me había olvidado.

Tomo su mano y me levanto de inmediato.

‐ Si, ya me siento mejor ‐ asegure en cuanto ya no sentía los efectos de la ansiedad. – vamos, de seguro ya han terminado de cocinarlas.

De nuevo comenzamos a caminar hasta la estancia donde la competencia de calabazas había sido celebrada, el lugar había sido muy bien decorado, dándole  un ambiente de granja embrujada

‐ Es allí ‐ señalé las mesas aún lado de la granja falsa que montaron para la competencia, unas cuantas personas parecían vender allí.

‐ Excelente, andando.

Era gracioso como corrió hacia la mesa llevándome a tropezones con él al no soltar mi mano. Cuando llegamos a la mesa rápidamente empujó a alguien que estaba por pedir también ocupando su lugar.

‐ Diez tartas de calabaza – puso cien dólares sobre la mesa en cuanto hizo su orden y lo mire sorprendida, los demonios deben comer mucho.

‐ Lo siento, acabamos de vender la última tarta – habla la mujer al tiempo que pone un pequeño cartel en el que dice “cerrado"

‐ ¡¿Cómo que no?!, ¿dónde hay más? – exclama enojado mirando a los lados y todos en sus mesas ponen los mismos carteles.

‐ Ya no tenemos tartas, la calabaza ganadora fue un éxito, nunca vendimos tantas tartas tan rápido – señala la foto en el recuadro detrás de ella y me sorprendo al igual que Zahiban cuando en la foto se ve una calabaza enorme, además de que Minder y una de las demonios aparecían como las ganadoras y dueñas de la calabaza.

¡Pero si a Minder no le dura ni un cactus!

La mujer toma sus bandejas vacías y comienza a guardar sus cosas mientras Zahiban mira frustrado hacia la luna.

‐ ¿Y ahora?, ya no se venden tartas – habla enfadado cruzándose de brazos.

Quiero ayudarlo, él también me ayudó, siento que debo devolverle el favor de alguna manera, así que tras pensar en alguna solución tomo la mano de Zahiban comenzando a dirigirme al sembradío de calabazas con una idea.

‐ ¿A dónde vamos? – pregunta Zahiban confundido detrás de mi mientras lo guío

‐ Si no podemos comprar una tarta, yo la haré.

‐ ¿Sabes hacer tartas de calabaza? – comenzó a caminar más rápido y interesado, incluso feliz.

‐ Si, tengo los ingredientes en mi casa, pero no tengo calabazas, así que iremos a comprar una.

‐ Yo me encargo – se detiene de repente haciendo que yo haga lo mismo y sin previo aviso me toma en sus brazos al estilo de recién casados ‐ ¿Dónde debemos ir?

‐ Al sembradío de calabazas- apenas termine de hablar él dio dos pasos y cuando vi al frente ya estábamos allí.

Vaya, eso fue muy rápido.

‐ Wow – hablé cuando me bajo con cuidado mirando alrededor – gracias.

El sembradío estaba iluminado por luces parecidas a las de navidad naranja, también decoraron con falsas telarañas las farolas que ayudaban en la iluminación, y en el medio del sembradío había un espantapájaros.