Pag 7

4 1 0
                                    

-Tienes razón, no vale la pena pensar en eso, gracias gatito.- Acarició cariñosamente al gato el cual respondió ronroneando. Estela rió un poco y agarró al gato para después dirigirse a su cama y tumbarse junto a el.-Sé que primero te tendría que dar una ducha antes de meterte a mi cama, pero creo que estoy demasiado triste como para que eso me importe- Rió y se acurrucó con su felino amigo.-Buenas noches.-Esta cerró los ojos para después, quedarse profundamente dormida junto al gatito que adoptó ese mismo día. A la mañana siguiente, Estela se despertó por el constante piar de los pajarillos, se estiró y bostezó para después notar que su querido gatito estaba despierto.-Buenos días pequeño- Le dió un tierno beso y procedió a ponerse el pijama, la noche anterior estaba tan triste que no pensó siquiera en ponérselo y no quería que Víctor notase eso, eran las 9 de la mañana, así que era seguro que el estaría despierto ojeando el periódico. Ya con su pijama puesto, Estela salió acompañada de su felino compañero.-Buenos días- Dijo algo triste Estela.-Buenos días, ¿Cómo dormiste?.-Preguntó Víctor sin quitar la vista de su periódico, parecía concentrado.-Como de costumbre supongo- Respondió algo cortante.-Bueno, te preguntaba por que anoche se ve que el asesino actuó otra vez, justo una hora después de que tu llegaras, se rumorea que todos sus actos podrían ser por alguna creencia relacionada al vudú, ¿Viste algo?.-Preguntó intrigado Víctor, quien ahora tenía la mirada fija en ella.-No, nada raro salvo este gato, ¿Crees que el sea el temible asesino?- Respondió riendo un poco.-Siempre tan bromista, me alegro de que estés bien- Sonrió de lado y volvió a poner la mirada fija en su periódico.-¿Te importaría hacerme una taza de café por favor?-Preguntó Víctor aún sumergido en las páginas de aquel periódico.-Marchando.

La sombra de sus actosWhere stories live. Discover now