- Cap 1 -

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- Padre, ya estoy en casa - Eran las 10 de la mañana, 1 hora antes de que entres a trabajar, siempre antes de ir visitabas a tu padre para saber su condición.

- Buenos días, Elizabeth estaba por ir a despertar a Carl - Viste a Markus, el androide que te acompaño la mayoría de tu vida. Este estaba encendiendo a los canarios que también eran androides.

- Esta bien, iré al salón a esperar - Dijiste para después ir al lugar que habías dicho. El salón era gigante al punto que tenía una estatua de una jirafa de tamaño real.

Tomaste un libro de la estantería y te sentaste a esperar. Después de unos minutos levantaste la mirada viendo a tu padre siendo empujado por Markus en la silla de ruedas, hace años él había perdido el sentido en sus piernas. Esbozaste una pequeña sonrisa al verle bien, pero rápidamente fue borrada, nunca sonreías más de unos 3 segundos aproximadamente, pocas cosas te hacían sonreír más de esos segundos, pasar tiempo con tu padre lo hacía ya que podías estar tranquila a su lado. Cualquier persona que te viera este pensaría que eres un androide por tu forma de hablar y tu carencia de expresiones.

- Buenos días, Elizabeth - Dijo Carl cuando finalmente paso por la puerta, ya no le sorprendía verte tan temprano en el lugar.

- Buenos días, padre, me alegra verte en buenas condiciones.. sabes a que me refiero - Dijiste mientras te levantabas y te dirigías hacia el dándole un beso en la mejilla como un saludo y despedida. - Espero que disfrutes tu desayuno, ya me retiro, en unos minutos debo entrar al trabajo, vendré cuando tenga tiempo libre - Regresaste el libro a su lugar y saliste del salón, a tu padre tampoco se le hacía raro ese comportamiento, era su rutina matutina según él.

. . .

Caminabas tranquilamente por las calles de camino a la comisaria, siempre llegabas tarde a pesar de que todos los días despertabas a las 6 de la mañana, pero tu prioridad era visitar a tu padre antes de entrar al trabajo.

- Detective Manfred, llega tarde, otra vez - Dijo la recepcionista androide al verte entrar.

- Lo lamento, fui a visitar a mi padre - Te acercaste y mostraste tu identificación para después ir a la parte de atrás, en el lugar había varios escritorios, pero el tuyo era el más ordenado y limpio del lugar, al punto que era fácil diferenciarte entre ellos.

Te sentaste en tu escritorio soltando un suspiro y tomaste los papeles que estaban en este, había algo que te tenía inquieta pero no sabias que era.

- Detective Manfred - Levantaste la mirada viendo a un androide, en su chaqueta decía RK800, su cabello es castaño oscuro y sus ojos de color marrón.

- ¿Diga? - Dijiste al notar que este esperaba una respuesta, después dejaste todos los papeles a un lado poniendo toda tu atención a él, ni siquiera habías podido leer los papeles.

- Disculpe por mi insolencia, soy Connor el androide enviado por CyberLife para ayudarle en su investigación junto al teniente Anderson, ¿podría decirme donde está el escritorio del teniente? - Soltaste un suspiro, no tenías una buena relación con el teniente ya que la mayoría de las veces este tenía olor a alcohol, el cual odiabas, pero cuando estabas con tu padre y el bebía no te molestaba mucho.

- Es el que está a mi lado - Señalaste el escritorio que estaba a unos centímetros de ti, se notaba que no había un orden y eso te molestaba, pero no era tu asunto.

- Gracias Detective - Dijo el Androide para después dirigirse al escritorio. Lo seguiste con la mirada unos segundos y volviste a centrar tu vista en los papeles, eran varios reportes de Androides que han asesinado a humanos al obtener la capacidad de simular las emociones humanas.

Emociones encontradas 》Connor x Tu《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora