Nuestros caminos (Roomie 3)

Capítulo 6 "Puedes rechazar esto"

—Pero... — tomé su rostro, aplastando sus mejillas, haciendo que casi sus ojos desaparecieran — ¿cómo?

Ella sonrió — Tomando un avión.

La volví a abrazar — Pero, ¿por qué no me llamaste para que fuera por ti al aeropuerto? — Respiré, sintiendo nuevamente esta tranquilidad — sabes que habría sido lo mejor para mí.

—Quería que fuera una sorpresa — nos separamos y me sonrió — ¿funcionó?

Asentí — La mejor desde hace mucho tiempo.

Thea volteo hacia la entrada, y yo también. Ahí seguía Luck, no se había movido ni un solo centímetro.

— ¿Tú no me vas a saludar? — Mi amiga le extendió los brazos.

Luck seguía mirándola desde la entrada, sin poder esperarse otro segundo más, casi voló hasta ella. Abrazándola fuertemente.

—Te extrañé... — susurró Luck.

Reí — Ya te oí — canturreé, pero él ni se inmutó.

Mientras le ayudaba a desempacar a Thea, ella me contaba sobre su experiencia.

—Aww, mira se aprieta — dije, tomando un juguete y comenzándolo a apretar casi hasta se reventara.

—Toc, toc.

Volteé y vi a Luck — Hermano, igual ya estás dentro.

—Pin, pon, sobras — dijo, entrando y recostándose sobre la cama de Thea — mañana es la fiesta de Matt.

Thea volteo, muy sonriente — Es cierto — y luego volvió a su armario — no tengo nada que ponerme.

—Yo tampoco — comenté.

Los dos suspiramos, al mismo tiempo.

—Vaya que son dramáticos — Luck se levantó — los esperaré en la camioneta.

Sonreímos, viendo como nuestro drama había funcionado.

—Tú — me apuntó — tienes muchas, pero muchas cosas que contarme.

Mis mejillas se calentaron y volteé hacia otro lugar — ¿Yo?, yo... yo qué podría contarte, digo... no es como, no.

—Aja — asintió sonriéndome — y no tengo que decir que obviamente es con lujo de detalle.

La miré y suspiré, ¿a quién engañaba? Desde hace tiempo quería hablar con ella sobre eso.

—Lo sé — dije levantándome de la silla de su escritorio — pero me vas a tener que ayudar a conseguir mi Outfit para la fiesta de mañana.

—Considéralo hecho.

STELLA

—Agh, el viaje de mamá se alargó — dijo Sofía detrás de la pantalla.

— ¿Cuánto tiempo más van a durar? — pregunté mientras hacia mi tarea.

Oí su suspiro — No lo sé, mamá le calcula que mínimo dos o tres días — y volvió a suspirar — yo ya había comprado un vestido bien lindo.

Volteé hacia la pantalla, viendo un vestido dorado.

—Es muy bonito — admití y volví a escribir.

— ¿Verdad?, lo había comprado para la fiesta de Matt y Abby, y mírame. Estoy aquí en Europa.

—Oh, que desgracia — comenté sarcástica.

Oí su risa — Eso se escuchó muy niña rica.

—Sí, bastante.

—Oye — vi como acercó de más su cara a la pantalla — oí lo que pasó en la fiesta de Bob.