7

444 69 9
                                    

Un teléfono suena.

Nezuko responde.

—¿Nii-chan?

—Nezuko ¿dónde estás?

—Estoy donde Senpai.

—¿Shinobu-senpai? Eh, vale. Pasaré por allí.

—¿Seguro?

—Sí, no hay problema.

—Bien.

Nezuko cuelga y de inmediato mira a Kanao.

Sobra decir que ella sabía lo que pensaba su hermana de Tanjiro.

—N-, No me mires de inmediato.

—Habla con él, al menos hoy. Se suponía que por eso nos estábamos juntando.

—Al final terminamos jugando juntas...

Nezuko se levanta del suelo donde estaba sentada frente a una mesa y toma las manos de Kanao.

—¿Qué importa si Nii-chan es de los importantes de la U? ¡Por antigüedad debes de tener más oportunidades!

—E-, Eso-

—¿Siquiera conoces a tu hermano? Él da mucho miedo ¿sabes?

Aoi toma de la leche que tenía en su vaso.

—¿Nii-chan? Nii-chan no da nada de miedo.

—Él no tanto, pero con quienes se junta...

—También conozco a los amigos de Nii-chan, todos son tratables ¿quieren que los presente?

Makomo palidece, Aoi no se queda atrás.

—No, no, no, no. No hay problema.

Aoi sacude su cabeza.

—No soy de andar con gente de la cream, gracias.

—S-, Sí, igual...

—Aoi, parecías conocer a Hashibira-san ¿de dónde lo conoces?

Recuerdos de vietman.

—¿A-, Aoi?

La cara inexpresiva de Aoi que pronto se volvería una mueca de disgusto, tras eso una de furia, luego una feliz, luego otra vez de ira y por último otra inexpresiva.

—Solo pasó.

—Exijo resumen.

Makomo se sienta frente a ella.

—¿Compañeros de clase? —asiente—. ¿Conocidos? —asiente—. ¿Novios? —asiente—. ¿¡NOVIOS!? ¿¡Cómo que fuiste nov-!?

La mano de Kanao silencia a Makomo, quien estaba histérica.

Entiéndase como rabieta de una solterona que aún no logra encantar a su antiguo maestro de educación física.

—Sabito-sensei te ha prestado mucha más atención últimamente.

Aoi frunce el ceño, mirándola mal.

—Y con Inosuke fue... bueno, algo así como la forma de que dejaran de molestarme en secundaria. Rompimos en tercero de preparatoria porque él debía irse con su padrastro. Aunque la de la idea fui yo, cosa que lo molestó. Luego intenté hablarle y me tocó pelear contra él para que me escuchara, me ganó y luego me dijo que no me acercara.

—Que rudo...

Nezuko mientras ellas hablan había terminado de recoger sus cosas.

—Volveré mañana.

Vicious Game - TanjiKanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora