CAPÍTULO III - Ser uno de ellos

10.6K 1.3K 498
                                    



Su pregunta me mantuvo pensando durante varios minutos. Aún reflexiono sobre todo lo que presencié allí dentro: gente muerta, personas matándose entre sí, individuos muy extraños, ojos rojos. ¡No puedo simplemente hacer como si nada hubiera ocurrido en un abrir y cerrar de ojos! Sería absurdo vivir fingiendo que no sé nada cuando todo está grabado en mi mente. Puedo narrar todo lo que sucedió con punto y coma. Mi cabello volvió a caer sobre mi cara debido a la brisa, y las hojas de los árboles se movían.

— Necesito que digas algo.

— Ehm...—me muestro nerviosa e intento responder como puedo—. Mejor me voy a casa y finjo que nada esto sucedió.

— No, mejor te asesino.

Me asusto y doy un paso atrás.

— Solo quiero irme de aquí, te juro que no diré nada.

— Pensé que lo habías comprendido y me equivoqué —dice, seriamente—. Escucha, si no te mato yo, te matará alguien más de Darkem.

— ¿Qué es eso?

— Un grupo de personas que se dedican a mantener vigente la Darkice. Escucha, yo no quiero ensuciarme las manos matando a una chica tonta para seguir a un ladrón, ¿Sabes? —admite, con un poco de enojo—. Solo quiero deshacerme de un cabo suelto.

— Solo déjame ir.

— Eso es imposible.

— ¡Ya me dijiste eso!

— Bien —guarda el cuchillo—. Vete, me giraré y fingiré que nunca te vi, pero...te prometo que cuando te des media vuelta, desenvainaré mi cuchillo y te lo enterraré cientos de veces en la cabeza. No sentirás dolor porque primero te lo voy a enterrar en el cuello, en donde vas a morir en treinta segundos exactos, luego de eso, desfiguraré tu cara para que seas irreconocible. Después...lo llevaré a Darkem y tendremos un fabuloso festín con la carne de una chica tonta.

Todo lo que dijo causó más temor en mí. Entiendo que soy un cabo suelto ahora. Creo que solo lo hice de forma inconsciente, no me imagine que esto podría ser tan oscuro como su físico aparenta, su cara no decía nada y al mimos tiempo, ahora lo dice todo. Es un asesino sin piedad que conmigo está mostrando un poco de consideración, no obstante, estoy segura que hay algo más.

Se gira y en ese momento, solo dejo escapar:

— Está bien.

Lo veo enfocarse en mí, sonreír de una forma espeluznante y asentir.

— Tengo dos condiciones: Una, fuera de aquí debes andar conmigo. Dos: Tendrás que hacer lo que yo te diga —explica, dando leves pasos—. Porque si un miembro de Darkem se da cuenta que no eres ni especial y mucho menos que no te maté, nos matan a ambos a sangre fría.

Niego rotundamente, pero luego asiento. Aviento un suspiro para sacar todo el aire que dejé dentro de mí por el bloqueo. Dejo que mi mente se disperse.

— ¿A qué te refieres con especial?

Él me hace una seña para que lo siga, cosa que me pone un poco nerviosa porque vamos en dirección hacia donde el chico peliblanco se dirigió. Eso quiere decir que me va a ayudar o a vender con su grupo de asesinos.

— Existen dos tipos de sangre en Nebril que son especiales. La primera es +o, pocas personas la tienen y cuando eso se combina con algunos fármacos, se convierte en la droga número dos. La que sigue es la -o, otro tipo que tampoco suele haber en Nebril y es potente al combinarla. Ambas son un negocio muy factible, solo que nadie habla de ello porque es confidencial —me explica dando pasos leves por el camino. Puedo escuchar su voz todo el tiempo como si se trata de un podcast—. Esa se vuelve la numero tres. Encontrar el tipo de droga que se acopla a ti, es dificil. Tendrás que consumirlas durante un buen tiempo para saber qué efectos hace en tu cuerpo.

EDUARDO - UN SECRETO ATERRADOR Y SINIESTRO © Próximamente en físicoNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ