Lan Zhan Y Jiang Cheng Siendo Bros

¿Qué hay de tí?

Quinto One Shot de la serie: Lan Zhan y Jiang Cheng siendo Bros.

Resumen:

—Hanguang-jun, no hagas que mi sacrificio sea inútil —suplicó Jiang Cheng. Ya había tenido un hermano que hizo eso, no estaba seguro de poder soportar que otro hiciera lo mismo—. Tienes que dejarme aquí.

Lan Wangji lo miró directamente a los ojos cuando dijo:

—No te dejaré.

—¡Tienes qué! —Jiang Cheng intentó levantar la voz, pero salió débil y patética, por lo que lo intentó de nuevo—. ¡No puedes morir aquí!

—¿Y tú si puedes? —Se sorprendió al descubrir que Lan Wangji sonaba genuinamente enojado.
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(Jiang Cheng se sacrifica por Lan Wangji y casi muere, pero a su vez salva la vida de Lan Wangji. Jiang Cheng simplemente no entiende por qué está tan molesto).

Notas del autor:
Así que la mayoría de las historias de esta colección son divertidas y alegres, pero quería probar algo diferente con estas dos. Espero que disfrutes la angustia <3

Jiang Cheng tuvo que contener un grito mientras aplicaba más presión a su herida.

—Esto ayudará a detener el sangrado —explicó Hanguang-jun. Sus palabras fueron breves y concisas porque estaba haciendo todo lo posible por no transmitir nada de su confusión interior. Y si, después de años de conocerse y pasar la mayor parte de ellos odiándose, Jiang Cheng finalmente vio a través de su fachada fría, bueno, no dijo nada.

Jiang Cheng inclinó la cabeza hacia atrás contra la roca, el sudor hizo que su cabello se pegara a su frente, e hizo todo lo posible por respirar a través del dolor. Realmente no quería parecer tan débil frente a Hanguang-jun.

—¿Puedo? —Lan Wangji señaló su túnica.

Jiang Cheng asintió, pero incluso un movimiento tan pequeño lo hizo sentir mareado. Su visión comenzaba a nublarse.

Lan Wangji quitó cuidadosamente la túnica exterior de Jiang Cheng, hasta que solo quedó la capa final. La sangre de donde la criatura lo había herido se filtró a través de la fina tela, manchándola de rojo.

Jiang Cheng estaba vagamente molesto por la idea de que si vivía después de esto, tendría que comprar más túnicas.

—Las túnicas son la menor de tus preocupaciones. —dijo Lan Wangji con frialdad. Oh, pensó para sí mismo, lo dije en voz alta. Al ver el ceño fruncido del otro, se dio cuenta de que también debió haber dicho eso en voz alta.

Revolvió los bolsillos de la túnica de Jiang Cheng hasta que encontró lo que estaba buscando. Era el frasco que Wei Wuxian le había dado hacía un par de meses. Aunque Jiang Cheng nunca lo admitiría, apreciaba el regalo de su hermano y lo llevaba a donde fuera, incluso durante las cacerías nocturnas.

Lan Wangji destapó la botella, aliviado de encontrarla llena, y luego le envió una mirada casi de disculpa—. Esto dolerá.

Levantó la ropa de Jiang Cheng hasta que su herida quedó expuesta. Había un corte grande y grotesco que le atravesaba el estómago donde la criatura lo había atacado.

Lan Wangji vertió un poco de licor sobre su herida para esterilizarla y evitar infecciones.

Jiang Cheng no pudo evitar el grito que le arrancaron. Pero descubrió que no podía dejar de gritar. La mano de Lan Wangji cubrió su boca, probablemente porque la bestia con la que habían estado luchando todavía estaba en algún lugar de la cueva. Pero, afortunadamente, también habían logrado herir al monstruo, el tiempo suficiente para escapar.