El Asesino De Mi Inocencia [KatsuDeku]

O8

El rubio los guió hacia el segundo piso del lugar, donde pudieron conversar con más tranquilidad.

-Con un niño -agregó el de la cicatriz en la ceja y ojos rubí con una sonrisa de oreja a oreja.

-De cinco años y que trata de resistirse -le siguió la rima el pelinegro -. Te van a denunciar, bro.

Ellos en serio no valoran sus vidas ni un poco. Enfrentarse así sin miedo al muchacho significa la muerte. Aunque ellos tampoco están del todo indefensos.

-¿Es del que nos hablaste antes, Katsubro?

-Sí -afirmó quitándole de nueva cuenta la botella de cristal a Denki -Que asco, esa cerveza es de baja calidad, ¿por que mierda tomas esa asquerosidad, puto Pikachu? Al menos está fría. Bueno, como les decía, él pronto va a caer a mis pies.

-¡Si no te gusta no te la tomes más, imbécil! -le gritó con mucho valor el ojiambar escondido detrás de su teñido novio.

-¿Sabes? Es curioso.

-¿El qué?

-Jorge.

-¿Qué Jorge?

-El curioso.

Kirishima reía de como su idiota favorito cayó de lleno tan fácil en los habituales trolleos de Hanta.

»-Pero ya, dejando las bromas, sí es raro que te enfrasques tanto en la misma persona.

-¿Qué mierda hablas, cara plana?

-Bakubro es de los que no insiste de más, si ve que lo rechazan o ignoran, simplemente va por la próxima -le explica su punto a sus amigos -. Si se hace la difícil se aburre e igual va por la siguiente.

-Es cierto. No les dedica más de varias horas; folla y se va, son chicas de una noche. Y esa es la otra, casi siempre son chicas -resalta Kaminari, que tenía una nueva botella.

-No me había dado cuenta. ¿Y si es así qué, cara plana?

-Creo que quien está cayendo a los pies de alguien es Blasty~ -canturreó Kirishima sin temerle a la muerte.

-¿Qué?

-Desde mi punto de vista, crees que él se enamorará de ti, pero claramente eres tú quien se está obsesionando.

-Exageras.

-Blasty, creo que Eijibebé tiene razón, le perseguiste desde otro país...

-Uh, Blasty está enamorado~, Blasty está enamorado~.

Claro está que el golpe que le asestó Katsuki en la cabeza no se lo quitaba ni Oda Nobunaga. Sero era más inteligente y valoraba más su vida, él estaba callado tomando su cerveza y comiendo su pizza de piña muy tranquilamente. Bakugō no se había dado cuenta de ello, le hubiera echado tremenda bronca por agregarle piña a la pizza, no le gusta. Aunque a Sero tampoco le agrada cuando el ceniza le echa picante. Por eso siempre piden sus pizzas separadas, no como la parejita que con ponerle jamón, aceitunas y extra de queso eran felices y la compartían.

-¡Cállense putos bastardos!

-No sé tú, Katsubro, pero recuerda que el culpable de la expulsión del paraíso, fue una manzana. Si dios puso la manzana fue para morder.

-Callate, imbécil. No tiene ni sentido la mierda que estás hablando -rieron todos juntos.

-¡No me entienden, estúpidos! -el pelinegro había perdido la paciencia, algo raro ya que él es el más calmado del grupo. Recuperó la compostura y comió un trozo de pizza -Lo que quiero decir es que él se convertirá en lo único que desearás, y terminarás arruinado por ello. Recuerda esto, acabarás tomando el fruto por amor y no deseo carnal.

-Uy uy uy, señor francés. ¡Sero filósofo!

-Iquibirís timindi il friti pir imir y ni disii quirnil.

-Eres desagradable, Denki. Ojalá te toque una Oreo sin cremita -le dio una mirada con ojos entrecerrados al rubio.

-No me gusta la cremita, siempre se la doy a Eijirō.

-Oscuridad sin luz, luz sin oscuridad, ninguno puede existir sin el otro -habló con tono melodramático Hanta y uniendo sus manos -, son perfectos sólo si están juntos.

-Relaja la raja, Sócrates, son solo galletas.

La mesa se llenó de risas por más tiempo.

-Ya serio, te equivocas, yo no me enamoraré. Ni ahora, ni de él, ni nunca ni de nadie.

-Está bien, relajate. Según tú es sólo un juego.

Con una sonrisa que a ojos de los otros muchachos, era insoportable, se sentó en la mesa tomando descaradamente de la botella de Denki. Se conocían desde antes, fueron compañeros de preparatoria, pero nunca se soportaron. Igual, todo contacto vale cuando estás en un país que no es el tuyo.

-Llévatela a la cama -todos miraron espectantes al nuevo integrante de la mesa -. Escuché la charla. Si de verdad es un juego lo que haces con ese niño, lleva a esa chica a la cama. Es gratis, un regalo de bienvenida de mi parte.

~•·•·•·•~

>:D bardo.