10.ꕤ

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- En realidad, estaría bien que sintieras celos de Dobby- dijo Yoshinori, con una mano en su mentón y una mueca en sus labios.

Los gricaceos ojos del gato negro lo miraron.

- Considerando que tú das mala suerte y Doyoung da buena suerte... Son como polos opuestos- dijo el tigre-. No sé por qué no lo había pensado antes.

El gato negro maulló, rodando sobre su lomo para que sus patitas tocaran al suelo, antes de cambiar a su forma humana.

- ¿Los conejos dan buena suerte?

- Sus patas dan buena suerte- dijo el tigre-. Y Doyoung tiene cuatro así que tiene mucha buena suerte.

Junkyu frunció el ceño, un pequeño mohín se instaló en sus labios.

- ¿Un mentiroso da buena suerte y yo no?

- La mentira no se relaciona con la suerte, pequeño tigre.

Junkyu seguía molesto, su lindo humano se había ido con el suertudo de Doyoung.

Aunque en realidad estaba triste porque no recibía atención, con las orejas caídas, comenzó a acariciar su peluda cola sólo para hacer algo, ya que Yoshinori se había entretenido con la pelota de nuevo.

Junkyu lo miró con ojos preocupados, él cubrió su boca como si así pudiera retener cualquier otro sonido triste que quisiera escapar.

- Creo que ya entraste en la segunda fase de los celos, tristeza - dijo el tigre, aunque no ayudo ni un poco al gatito.

Junkyu bajó la cabeza, ocultando unas lágrimas que brillaban en sus ojos.

- Oh, Kyu - Yoshinori abrió sus brazos, ofreciendo un abrazo que el gatito rechazó.

Antes de que pudiera decir otra cosa, la puerta del cuarto se abrió, entrando Haruto rápidamente.

- ¡Junkyu! Estabas aquí, ¿Por qué te escondías? Te estaba buscando.

Haruto se había acercado a los dos felinos, pero al ver la postura de su minino, se preocupó un poco, arrodillándose a su lado para acariciar su cabeza y orejitas.

- Gatito, ¿Qué tienes? - murmuró, inclinó a Junkyu hacia él, envolviendolo con sus brazos, dejó besos sobre su cabeza en un intento por calmarlo- Jun~, ¿Qué le pasa a mi gatito llorón?

Haruto continuó haciéndole mimos y dándole besitos, Junkyu se había acomodado casi encima de él, con el rostro escondido en su pecho, hasta que había empezado a ronronear.

- Lindo gatito, ya es tarde, ¿Vamos a casa?

Junkyu simplemente asintió, cambio a su forma animal sólo para Haruto pudiera cargarlo, saliendo de la casa de Yedam sintiéndose cálido entre los brazos de su humano.










🐨

𝐁𝐀𝐃 𝐋𝐔𝐂𝐊 ෆ 𝗵𝗮𝗿𝘂𝗸𝘆𝘂Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon