-Y yo me me voy que encargar de que no engendres.

-¡Oye no! Yo quiero sobrinos.- defendió la pelinegra .

-Les recuerdo que yo sigo aquí- reclamo Anne.

-Lo siento Anne.- las chicas rierón. Eveline camino hasta las chicas para platicar con Jessenia e Anne. Mientras Mike y Jeremy me vierón de una manera extraña.

-¿Qué me ven idiotas?

-Relájate bro, es sólo que no se que tienes . Estas muy raro el día de hoy.

-También se lo dije en la mañana pero el muy bestía sigue diciendo que no es nada .

-No estén jodiendo. Oye Mike .

-¿Qué?

-Más te vale que no te acerques mucho a mi chico o sufrirás las consecuencias- bromee sorprendiendolos.

-¡No puede ser! - las chicas mirarón en nuestra dirección.

-¿Pasó algo!- preguntó Jessenia.

-¡Preciosa, se va a acabar el mundo! Este idiota acaba de hacer una broma.- me señaló. La pelinegra negó divertida aunque su semblante fue confuso ;se que ella sabe que algo está ocurriendo . Pudiera decírselo pero sólo quiero que esta noche sea normal.

Negué ante las ocurrencias del estúpido castaño,  me acerqué a mi chica .

-Wattson tenemos que hablar.- ella asintió, nos levantamos e caminamos lejos de los chicos.

-Dime que te está sucediendo Vandort,  me preocupa que te estés comportando de esta manera.

-Ni siquiera yo lo Wattson, pero tengo una rara sensación de que algo puede pasar.

-Me estás asustando, si estás jugando déjame decirte que no es nada divertido.

- No seas tonta,me encontré a tu padre y me dijo sobre su viaje a Canadá.

-Si.

-Quiere que vaya con ustedes.

-¿Irás?

-Irte soportando todo el camino es una tortura.

- En verdad que me encanta tu romanticismo.- frunció su cara molesta. Átrape su mano sobre la mía e empecé a tratar líneas sobre su palma.

-Por supuesto que iré, niña tonta. Pero te aclaro que no es por tí, si no, por qué no se puede rechazar  a un viaje todo pagado .

-¡Ouch, eso si dolió Evans!

-Las verdades siempre duelen Wattson.- uno de mis anillos se atoró en su sudadera.

-Siempre me he preguntado por qué
tantos anillos .

-¿Estás muy segura de que la curiosidad no es una enfermedad?  Por qué tú estas demasiado grave.

-Ja, ¿ya puedo reírme?

- No, haces mucho ruido.- llego al límite de su paciencia.

-¡Ya!- comencé a reír como si no hubiera mañana.

"Algo más que simples cartas"   (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora