Gifts of my crush

18

- ¿Por lo menos sabes en dónde vive? -Jeno inmediatamente negó a la pregunta que le hizo Mark -Bien, entonces esperen un momento.

Mark se levanto y lo primero que hizo fue desbloquear su celular y marcar un numero, tanto Jeno como Jisung lo miraron frunciendo levemente el ceño, ¿qué es lo que estaba planeando? Mark se alejo de ellos para poder seguir con su llamada.

Mark tenía un pequeño secreto, y es que a veces se aliaba con los de periodismo que se encargaban de los blogs de Jeno, tenía que admitir que pagaban muy bien por las fotografías que les enviaba, usualmente le pedían que le tomará fotografías a Jeno para que así pudieran escoger las mejores, y por eso Jeno a veces se sorprendía al ver algunas fotografías suyas que estaban demasiado cerca, todas eran en la universidad, pero se preguntaba quien era la persona que le tomaba aquellas fotografías, lo bueno es que Jeno no estaba enterado de que era él.

- ¡Lia! Que bueno que contestas, necesito un favor -hablo de inmediato Mark

-¿Un favor? ¡Aún nos debes las fotografías de la semana pasada! -Mark alejo un poco el celular de su oreja para no escuchar tan cerca aquella exclamación de reclamo de Lia.

- Lo sé, lo sé, ya las tengo, en la tarde te las enviaré, pero ahora en verdad necesito tu ayuda.

- ¿Qué es de tanta importancia como para que-

- ¿Tienes la dirección de Na Jaemin? -interrumpió de inmediato Mark, al otro lado de la línea se escucho que Lia prácticamente se había quedado en completo silencio, para después soltar un chillido emocionada.

- ¿Qué? ¿Te interesa el próximo novio de tu amigo?

- No, pero él quiere verlo, será mejor que no indagues tanto en el asunto, sé que tienes su dirección, son buenas buscando información.

- Lo sé, cariño, lo sé, te la envió por mensaje, a cambio quiero las fotos para está noche, ¿estamos de acuerdo?

- Por supuesto.

Mark corto la llamada y luego miro el mensaje que Lia le envió, la dirección de Na Jaemin, nada podía salir mal.

- ¡Chicos! La tengo, Jeno prepara el regalo, iremos ahora.

- ¿Cómo la conseguiste tan rápido? -pregunto Jisung frunciendo levemente el ceño, sabia que Mark ocultaba muchas cosas.

- Tengo mis contactos.

Chenle soltó un bostezo, estaba junto con Jaemin viendo un serie cuando unos toquidos en la puerta se escucharon, pero aún así,  se levanto perezosamente para poder acercarse a la puerta y abrirla, sus ojos se abrieron en grande al ver de quien se trataba, allí estaba Jeno con una sonrisa y con sus manos detrás de la espalda.

-Perdona la hora que es, pero ¿se encuentra Jaemin? -pregunto Jeno a lo que Chenle solo dio un asentimiento y miro hacía atrás, quería gritar, ¿en verdad estaba Jeno frente a su departamento y buscaba a Jaemin? ¡Esto era una locura!

-Jaemin -el mencionado dejo de comer las frituras para mirar hacía Chenle y ver que detrás de él estaba aquella cabellera castaña tan conocida para él, casi escupe al percatarse de que Jeno se encontraba afuera en el pasillo -te buscan~

Maldecía a Chenle, prácticamente Jaemin era un desastre en esos momentos, tenía su pijama puesta, la cual era un conjunto de unos pantalones blancos con aquel osito de Kakao Talk que tanto amaba y estrellitas pequeñas, más una camiseta con el rostro de aquel mismo oso también de color blanco, sus cabellos estaban algo mojados debido a la ducha que acababa de tomar.

- Voy -fue lo único que pudo salir de sus labios, dejo la bolsa de papas en la mesa de la estancia y se dirigió hacía la entrada, se sentía sumamente nervioso.

Chenle se retiro de la puerta, no sin antes mirar hacía Jaemin y guiñarle el ojo para brindarle suerte, Jaemin después de ver eso, su vista se dirigió por completo a Jeno quien se mostraba con una radiante sonrisa hacía él.

-¿Jeno? ¿Cómo..?

-No fue fácil, tuve un poco de ayuda para encontrar en donde vives, y aquí estoy- Jaemin sintio sus mejillas tibias, se estaba comenzando a sonrojar-, por cierto, se me ha olvidado por completo tu regalo, así que... -Jeno dejo de esconder sus manos para mostrar lo que traía, los ojos de Jaemin brillaron al ver lo que era, simplemente era un pequeño llavero de aquel oso amado por el peli azul, un pequeño oso de plástico con una flor en sus manos, quería chillar de la emoción al verlo-, sé que te gusta este oso, y quise darte algo -le entrego el llavero -espero te guste.

- ¡Me encanta! -la emoción en la voz de Jaemin solo hizo que Jeno se sintiera tan feliz en aquel instante-. ¡Muchas gracias Jeno!

De nuevo aquella preciosa sonrisa, Jeno quería darle un beso en ese momento, pero las palabras de Mark aún permanecían en su cabeza, debía ir lento y no asustarlo.

- Me alegra Jaemin, bueno, tengo que irme, no quiero que te desveles, descansa -Jeno se acerco un poco a él y deposito un beso pequeño en la frente de Jaemin haciéndolo sonrojarse de inmediato.

Definitivamente Jaemin se sentía tan cálido con aquel acto.