• El tip es interrumpir

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—Dame, yo lo hago por ti

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—Dame, yo lo hago por ti

Se ofrece Oliver ansioso a llevar el desayuno a unos huésped por mí. O ama su trabajo, o teme a que me tropiece de nuevo y por poco derrame todo el jugo en el ascensor como hace unos minutos.

—Calma, yo puedo con esto— dije con la bandeja en mis manos.

—Tienes que subir hasta el piso 36 —. Recordó  con firmeza.

Trago grueso,dejo mi orgullo a un lado y me rindo

 —Si tanto insistes — me encojo de hombros y le entrego la bandeja. Se ríe de mi cobardía.  —Es que me necesitan en recepción — justifico, en un vano intento de salvar mi orgullo herido.

—Como sea — poza su mano en mi brazo y lo acaricia  —conmigo no tienes que fingir. Descuida Cris.

Me llenó de alivio y se fue.

Aunque los ascensores me aterran un poco, «un miedo irracional puesto que nunca he quedado atrapada en uno como en las peliculas» es verdad que Khloe me necesita en recepción. Recuerdo la última vez que me llamaron, para ingresar la clave del WiFi a Hugo. Mi respuesta a su oferta fue un "Buenas noches señor" y me di la vuelta saliendo de su vista. No sé en qué pensaba él en ese momento, pero quiero creer que Hugo no es esa clase de chico.

Lo se.

Voy entrado a la lujosa cocina blanca del hotel en busca de un poco de café para mi. A mi alrededor todo brilla, juro que puedo ver mi reflejo en los platos limpios. Hay unos cuantos chefs picando, rebanando y batiendo el desayuno ¿que hora es? debe de estar amaneciendo Dios, estoy perdida en tiempo y espacio, y lo digo enserio, esta cocina es inmensa, estoy dando vueltas observando cada rincón, y nada, solo ollas, sartenes, refrigeradores,batidoras y cuchillos a la vista, sin rastro de una cafetera.

 —¿ Estáis perdida eh?

Desvio mi vista hacia el chef que está vertiendo algo líquido en la licuadora. — Amm no, solo verifico que tod— enciende la licuadora ruidosa opacando mi voz  —Verifico que todo esté en orden— con un tono más fuerte, miento, pero creo que no me escucho.
—Si ya veo, ¿entonces aun hay cucarachas por ahí?- pregunta mientras echa esencias a la mezcla. Me paro de puntitas y me muevo hacia una lado como si el suelo fuera lava, paranoica observando el piso  —¿Que? ¿Donde? aquí hay cu...nono ¡matala! — digo aferrandome a el chef como si un asesino en serie viniera por mi.

 —Vaya con que eres La Nueva— ríe negando con la cabeza y sirve el batido en una taza. ¿A que se refiere con La Nueva? bueno, no debí mentir en primer lugar , pero me apenaba un poco no poder encontrar solo un café. Tampoco quería ayuda.
 —Me atrapaste, bravo ¿tan obvio es? — tomando distancia de el, sin dignidad, froto mi muñeca derecha con mi mano izquierda un poco avergonzada.

 —Solo lo se, muy pocas chicas de tu edad obtienen el puesto que tienes — oh eso lo explica. Se limpia las manos con un paño para luego decorar el plato.  —Tienes suerte de tener una amiga como Khloe.

A través del Cast [en proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora