Epílogo

725 109 22
                                    

Hyunjin por fin estaba tranquilo, las grietas de su rostro habían desaparecido, también las de sus brazos y espalda. Mientras tanto HaNeul estaba intentando recuperarse, iba a ser duro pero por fin podía ser ella misma.

—¿Cómo están? —les preguntó T/n a los chicos que se encontraban acostados en la cama.

—Mejor, yo realmente me siento bien ya, me quite un peso de encima —confesó el más alto con una sonrisa.

—Me duele todo pero me siento más tranquila, solo que no tengo idea si se va a quitar esa cruz de mi espalda —rió débilmente HaNeul—. Perdón chicos, por todo.

—No fue tu culpa Neul, todo está bien ahora —añadió T/n con felicidad.

En la tarde Jihoon se quedó cuidando de HaNeul y Ten junto a Hyunjin y T/n fueron a la biblioteca donde la abuela de Eunha ya había regresado.

—Buenas tardes —dijeron los tres chicos entrando.

—Le hemos traído algo —agregó T/n sacó el espejo de su bolso.

—¿Un espejo? —cuestionó algo confundida.

—Recuerda la leyenda de la bruja que por rabia encierra a un chico en el espejo —le preguntó Hyunjin a la bibliotecaria y esta asintió.— mi
nombre es Hwang Hyunjin, yo era el chico en ese espejo.

Lo dijo de la manera más tranquila posible y mantenía una sonrisa, la bibliotecaria estaba más que sorprendida.

—Pero ¿cómo?, si tú estás aquí, ¿quién está en el espejo —preguntó con preocupación.

Tomó el espejo y lo puso frente a su cara, se volvió negro y ahí estaba, una joven de unos aproximadamente 25 años con cabello color negro, una bata blanca y su piel era de un tono muy claro, casi pálido.
Goleaba desesperadamente el vidrio del espejo que estaba por dentro, la bibliotecaria estaba sin palabras.

—Queríamos saber si usted podía cuidar de el espejo, es muy frágil para que lo tengamos nosotros —confesó T/n avergonzada.

—Si el espejo se rompe ella podrá salir de nuevo, confiamos en que usted podría cuidarlo bien —añadió Hyunjin con seguridad.

—Chicos, tengo una mejor idea —les dijo Ten a ambos y a la bibliotecaria.

Se despidieron y fueron a un campo vacío, pusieron el espejo en una caja de madera, con una pala Ten comenzó a cavar mientras tanto Hyunjin y T/n estaban sentados en el césped bajo la sombra de un árbol.

—Tenía mucho miedo de perderte, por primera vez había conocido a alguien que me hacía sentir bien, no quería que acabara mal —confesó T/n y abrazo a Hyunjin.

—Recuerdas el día que nos conocimos, tenías mucho miedo y yo me estaba riendo —parloteó Hyunjin riendo.

—Me sacaste un susto que esperabas —rió—. El día que conociste a Taehyung, casi te descubren por abrir tu bocota —añadió T/n y le dio un ligero golpe en el hombro.

—Estaba celoso —confesó el más alto y rió.— El día que por fin salí del espejo y pude ver y sentir como era el mundo actual me sorprendió demasiado, me asusto el pensar que no podría llegar a adaptarme al haber nacido en épocas distintas pero estoy feliz, no se que sería de mi si no te hubiera conocido.

Por primera vez Hyunjin hablaba de lo que de verdad sentía con respecto a su salida, siempre había tenido un vacío por dentro, ahora que no había peligro sentía que ya podía sacar sus viejas preocupaciones, le venía bien hablar de eso.

—No sabes cuánto te amo T/n, fuiste mi ángel salvador junto a Jihoon.

Hyunjin le dio un beso en la frente a T/n la cual se puso colorada.

—¡Ya está chicos! —gritó Ten todo sudado tirando la pala al suelo.

Ambos se pararon tomaron la caja y la pusieron en el agujero, pusieron la tierra que había sacado Ten y la cubrieron bien.

Dejaron que Ten descansará un poco y después se fueron de ahí prometiendo jamás volver por esa caja.

Ten se fue a su casa y Hyunjin junto a T/n pasaron el resto del día visitando varios lugares a los que Hyunjin quería ir.

Se asombraba por cada pequeña cosa, tenía una gran sonrisa en su cara hasta que surgió una idea en su cabeza.

—T/n necesito que me acompañes a un lugar —le dijo Hyunjin a la recién nombrada la cual asintió.

Tomaron un taxi y los llevo hasta un viejo cementerio abandonado, ahí era donde enterraban a las personas de la época de Hyunjin.
Se acercaron al libro que estaba ahí donde indicaba en que lapida estaba enterada la persona, Hyunjin buscaba el nombre de sus padres o de su hermana hasta que por fin dio con ellos, los tres estaban juntos.

—¿Estás seguro que puedes con esto? —cuestionó T/n, tocó su hombro y le sonrió.

—Vamos —suspiró—.

Ambos caminaron hasta donde marcaba el libro, habían pasado antes a comprar flores así que iban cargando con ellas, llevaban una cubeta para poner agua en los jarrones que tenía cada lápida.

—Llegamos —añadió el más alto en voz baja.

T/n le dio un momento el se acercó y miró con detenimiento ambas lápidas.
Leyó lo que decía cada una, jamás habían dejado de buscarlo, sobre estas habían algunas fotos y velas viejas, el chico se acercó y tomó una foto, en ella estaban sus padres, su hermana y él, ese día era su cumpleaños 17.

—T/n mira —le dijo con una sonrisa, sus ojos estaban lagrimeando.

—Oh, ¿ella era tu hermana? —le preguntó al peli negro y el asintió.— Era muy bonita.

—Aquí cumplí 17 años —agregó y volvió a dejar la foto en su lugar.— Jamás dejaron de buscarme, las lápidas lo dicen —soltó con la voz entrecortada.

T/n lo abrazó y sobaba suavemente su espalda mientras Hyunjin se tranquilizaba.

—Mi hermana tuvo hijos y no pude verlos nacer, no pude conocerlos —comentó, se culpaba de todo siendo que él no había hecho nada.

—Hyunjin, no es tu culpa, nadie puede predecir su futuro, esta bien llorar pero nunca te culpes —añadió T/n con una media sonrisa.

Esperaron un rato y pusieron las flores en los jarrones, se quedaron toda la tarde ahí viendo las fotos viejas de Hyunjin.

Tenía la oportunidad de continuar con su vida y lo haría de la mejor manera, lo haría por su familia y por T/n, porque estaba agradecido con lo que T/n, Jihoon y Ten habían hecho por él, por todo el tiempo que perdió atrapado ahí.

—Estoy decidido a prosperar, trabajaré duro para entrar a una universidad y tener un buen futuro, para que pueda vivir bien, seré una nueva persona ahora —comentó Hyunjin, ambos caminaban de la mano iban para el departamento de Hyunjin.

La lluvia comenzó a caer, Hyunjin y T/n comenzaron a corre y jugar en ella, ambos estaban totalmente empapados, reían a carcajadas.

—Estoy feliz de que ahora seamos tú y yo a través del espejo, te amo.— le dijo la castaña a Hyunjin y le dio un beso.

Ambos seguían bajo la lluvia, se mantuvieron ahí un rato abrazados disfrutando de su compañía ya que al fin podían estar juntos.

Remember me: el espejo reclama lo suyo; Hwang HyunjinWhere stories live. Discover now