Vendido (Yaoi/Gay)

#08 ¡Torpe!

Santiago Vaqueir

Ese día por alguna extraña razón un carro pasó por donde vivía con "Physical" de dua lípa, a todo volumen tan Fortísimo que lo separó de los brazos de Morfeo.

Se levanto más animado de lo normal ese día sería el "Gran Lunes" de toda su vida, gracias aquel profesor de baile en el que no dejaba de pensar...

Se duchó, cambio de ropa específicamente a la de baile para ir ya preparado y listo, bajo saludo a su mamá y pidió las llaves para salir de ahí, está no estaba muy contenta de que se fuera sin desayunar a las clases de baile

—Déjalo mujer, no vez que ahí va la niña que lo tiene todo pensativo—. Dijo su papá con un tono particularmente "Orgulloso"

Su madre sonrió y respondió —Mi muchacho todo un picarón—. Para después comer un bocado de hotcake

Asintió y con una amable sonrisa se despidió, a lo lejos pudo escuchar "Dios te cuide" no podía evitar sentir algo de culpa principalmente por no corregir a su padre y aclararle que era "Chico" pero ya tendría tiempo para eso subió al coche y empezó a conducir dirección a la
Academia de baile, encendió la radio "NDA" de billie Elish era la canción que sonaba, no pudo evitar subir lo más que pudo el volumen y empezar a tararear la canción...
No aguanto sonrojarse con lo parecido de aquellas letras y ritmo a cómo se estaba sintiendo, cuando menos se dio cuenta ya había llegado al lugar, se estacionó y se dispuso a entrar

Aquella bonita fachada lo recibía, Junto al guardia de seguridad y la recepcionista por un segundo sintió una pesada mirada encima de él, volteó y se sintió confundió al ver un lujoso Ferrari alejarse del lugar omitió aquello y continuó una vez saludo  a la hermosa chica pelo negro terminó de entrar, un balde de agua fría imaginario pareció caer sobre el, aquel rubio que solía ser muy amigable y amable estaba insinuándosele de manera descarada a su profesor de baile... El hombre por el que estaba cuestionando su sexualidad y este parecía no entablar sus límites, cuando ambos se dieron cuenta de su presencia el corto espacio personal entre ambos desapareció el chico continuó su camino mientras su profesor le saludaba como si nada hubiese pasado

—¡Buenos días, Santiago pasa!—. dijo en un tono de voz normal, lo más calmado y neutral posible — Veo que ya vienes cambiado, ve hacer tus ejercicios de calentamiento—.

—¡Buenos días, Profesor!—  le respondió con su mejor "Sonrisa"  y prosiguió a seguir su camino.

No se había detenido a detallar nunca la academia de baile, era un espacio muy pero muy grande con espejos a todos los costados una bonita alfombra  color negra, una muy moderna y algo lujosa.

Decidió entrar al baño antes de empezar la rutina de calentamiento, una parte de él se sentía traicionado y la otra le decía que no podía sentirse así porque no eran absolutamente nada más que "Profesor" "Alumno"  aunque eso último le hacía  cuestionar  que si fuera solo su "Profesor" no se sentiría así.

Se detuvo a recordar cuándo o con quien había sentido algo parecido... eso lo hizo hacerse una nueva pregunta ¿Porque había surgido esa molestia, esas ganas de separar al rubio de él? Nunca fue así con alguna de sus ex's  eso significaba que por primera vez en su vida se había sentido "Celoso" eso lo hizo entrar de nuevo en pánico hasta que aquella voz le hizo salir de sus pensamientos

—¿Todo bien? Ya debería salir... Te estamos solo esperando a ti para comenzar la rutina de baile—.  Mencionó muy amable su profesor de baile.

—Ya salgo, no demoro ni 5 segundos—. Una vez finalizó eso salió del baño.

Un par de horas después, sentía como sus piernas ya no podían más al igual que sus ánimos por seguir bailando ese día habían enfatizado mucho la práctica del "Twerking" por lo que había sido muy vergonzoso para el todo eso, sin contar Que Las demás rutina de baile se seguían sintiendo incómodas, no es como tuviera el derecho de seguir sosteniendo ese sentir pero por más que intentase borrar de su cabeza ello regresaba una y otra vez en un bucle que no le causaba ningún tipo de gracia pero que no podía evitar.

Aquella alarma que daba al fin de las clases, fue música para sus oídos y cuerpo de verdad se encontraba muy exhausto  esa primera parte del día, decidió ir al probador masculino, se quito aquella sudaba camiseta y shorts, saco de su mochila su bonito conjunto deportivo "Adidas" no podía evitar sentirse un famoso con el por eso le gustaba, una vez se disponía a salir hasta que una voz familiar le hacía detener la acción que ejecutaría.

—Está Guapísimo el profesor, esta mañana que hablaba con él no podía evitar mirarle cómo se le
Marcaba sería de ensueño estar con el—. Finalizó aquel chico de la mañana, el causante de lo enojado que se sentía en ese momento. 

—La verdad es que si, esta muy muy guapísimo... lástima que ninguno de los dos seamos su mira—. Le dijo el otro al chico de la mañana entre dientes  parecía realmente incómodo 

— No entiendo cómo se puede fijar en el chico raro de los videojuegos—.

—O chico ese culo no pasa desapercibido además no has escuchado que los más pervertidos son los gamers, otakus y así —.

—Pues no me daré por vencido, ese chico no parece que sea gay—.

Respiro hondo y prosiguió abrir la puerta de su probador Para marcharse del lugar, dejando helados y con facciones confundidas a los otros chicos.

~*~

Pablo perry

Lunes el peor día de la semana para el, odiaba realmente tener que levantarse temprano principalmente porque no había tenido la oportunidad de dormir la noche anterior, de nuevo el "Comprador de Santiago" quería verlo bailar solo que uno más atrevido... malditos árabes pensó no podía comprender porque aquella obsesión con que supieran bailar bien sus juguetes sexuales.

Mientras manejaba recordó cómo era su vida antes de toda esa mierda en la que se había metido, lo parecido que era aquel chico de su difunto esposo... espiritualmente vibraban de una manera muy similar, empezaba arrepentirse de haberlo agregado al catálogo.

Llego aquella fachada llamada "Academia de baile"  prodigio a estacionar su coche y dirigirse a la entrada,  una vez empezó a saludar a todos con su sonrisa perfecta uno de sus alumnos le saludó y empezó a acercarse mucho más de lo que le llegase a gustar... para hacer más incómodo el momento Santiago llego... pudo sentir su cara de incomodidad, esto le hizo regresar a un dejavú.

Toda la mañana noto como la
Cámaras enfatizaban en sus alumnos, aquellos cerdos que los habían comprado estaban dándose un festín con aquellas poses y cómo sacudían el trasero a la "Coreografía" después de una intensas clases por fin estas habían terminado, se dispuso a buscar aquel chico quería invitarle a almorzar pero no lo conseguía hasta que se tropezó con este que estaba saliendo de los
Probadores masculinos.

—Lo siento profesor—. Le comento serio Santiago.

Lo miro de arriba abajo ¿Donde estaba el chico tímido del cine? —No hay problema de hecho quería buscarte—.

—En que puedo servirle— respondió de nuevo serio sin poder siquiera mirarlo a los ojos.

No pudo evitar sonreír, se veía Tan adorable "Celoso" — Iremos almorzar juntos hoy—.

—No creo poder, gracia por su invitación pero me espera mi madre para ir hacer unas cosas hoy—

—No es una pregunta, tu y yo quedamos en ir desde el día del cine, tranquilo no muerdo solo lo haré si me lo pides—. Finalizó en un tono algo pícaro.

Aquel chico se puso rojo como un tomate, esta acción le hizo morderse los labios... sintió como despertaba su miembro como su corazón se aceleraba era tan jodidamente tierno que le transmitía querer follarselo todo el día.

Continuará...