Han pasado dos años desde su segundo si quiero, desde que por fin decidieron ser felices.
Fue una celebración en el jardín de casa, con sus hijos, sus nietos, sus amigos. No necesitaban más.
Muchos años después, tras nubes y arcoíris, y sobretodo tras la gran tormenta que pasaron, se volvían a mirar con los ojos brillantes ante el altar. El volvió a llorar al verla acercarse, ella volvió a sentir que se le salía el corazón del pecho a cada paso que daba. No veían a nadie más, solo se veían a ellos.
Ella con un vestido de encaje y el pelo suelto, él con una camisa blanca y un pantalón negro, rodeados de flores y pétalos de rosa que cubren toda la piscina.
-Chloe lo has puesto ya tres veces seguidas-le dice Mateo refiriéndose al video de la boda-
-Es que es muy bonito tío
-¿Vamos a jugar con la pelota al jardín?
Ambos salen corriendo y Aitana y Luis los observan desde la cocina mientras acaban de preparar la cena.
-¿No te parece increíble? Chloe ha hecho ocho años, Mateo es mayor de edad y el pequeño Lucas ya tiene casi tres añitos
-Nos hacemos mayores Luis
Luis la rodea con sus brazos y le da un beso en el cuello.
Estos dos años han sido sin duda los mas tranquilos de su relación, y parece que han aprendido a hablar, por fin.
Lucía le acaricia la rodilla a Lucas en el jardín, el cual se acaba de caer otra vez intentando seguirles el ritmo a los mayores, Lucas es un niño muy movido y extrovertido, y para su orgullo se parece mucho a su abuelo Luis, su marido hace de portero para Chloe, la cual cada día se parece más aun a Aitana, pero sin flequillo. Y Mateo disfruta jugando con Chloe, y sobretodo haciéndola rabiar.
Luis y Aitana se dan la mano para salir con ellos al jardín, donde seguramente Aitana se acurrucará con su pequeño Lucas en el balancín y Luis se unirá a los que juegan, ayudando a Chloe a no desesperarse con el que sabe que se parece demasiado a el en carácter.
Antes de salir por la puerta del jardín se miran y sienten esa sensación de plenitud, de rebosar de amor, de felicidad. Pero justo antes de salir oyen el timbre. Ester y su tropa vienen junto a Alicia para cenar con ellos por su aniversario. Y es que ahora sí que no les falta nada.
Fin.
Hola chicos/as! Siento muchísimo estar tanto tiempo sin pasarme por aquí, mi vida ha sido un caos y no sentía inspiración, además de que Aitana y Luis como tal ya no son una fuente de inspiración para mí.
No sé si alguien seguirá por aquí o si leeréis este final, que ya tenía escrito pero no sentía las fuerzas para subirlo y acabar con esta etapa.
Voy a comenzar otra novela, con otros personajes, otros nombres, pero conservando la esencia, las características de ellos en gran parte. Os animo a que llegado en momento la leáis a ver si os engancha, y me gustaría saber si tenéis ganas de leer algo nuevo o esto acaba aquí. Muchas gracias por todo, sin vosotros nunca hubiera pasado de las primeras líneas de la primera historia que escribí.
