Amapola - Sueño

C61 - Celebración

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MoMo se sonrojó, tomó el agua que le había entregado Gu Yu, se enjuagó la boca y se la secó con papel, levantó los labios y sonrió, ―Estoy bien.

Cuando sus ojos se posaron en la carne, no pudo evitar volver a vomitar en seco.

En el momento en que MoMo vomitó, Roald, en el segundo piso, se levantó y miró a Guy: ―¿Hay un médico? 

Guy se levantó y salió: ―Sí, ahora me pondré en contacto con él.

El resto del grupo también se levantó y bajó las escaleras.

MoMo se dio cuenta de por qué reaccionaba esta vez, y se acercó para apartar su plato, ―Lo siento, no sé por qué, pero no me siento bien viendo carne.

Merlín apartó rápidamente su plato como pudo y empujó el suyo, culpándose a sí mismo. ―No debo haberla cocinado bien.

MoMo le tranquilizó: ―No tiene nada que ver contigo.

―MoMo ―, Roald se acercó rápidamente y Gu Yu se apartó del camino. Roald miró a MoMo: ―¿Dónde te sientes incómodo? 

MoMo negó con la cabeza: ―¿Por qué estás aquí? 

KiKi tomó el brazo de Qin Sheng, ―Sheng, ¿no regresaste? 

Cyno caminó hasta el asiento de Gu Yu, tomó un ala de pollo y la mordisqueó, levantó una ceja hacia Gu Yu y le dio un pulgar hacia arriba.

Guy les dijo: ―Este es el médico de la familia, que le eche un vistazo a MoMo.

MoMo quiso decir que no se molestara, pero Roald ya había asentido con la cabeza.

El médico sonrió tranquilizadoramente a MoMo: ―Está bien, si tienes una enfermedad, la trataremos, y si no tienes una enfermedad, no tienes que preocuparte.

MoMo se sentó y el médico le examinó. El resto del grupo miraba al médico y observaba su expresión. Cuando el médico miró los resultados, sus cejas saltaron y parecía emocionado. Justo cuando todos pensaban que iba a decir los resultados, hizo una pausa y empezó a reexaminar.

Todos los presentes no pudieron evitar ponerse nerviosos. Si estaba bien, no se le volvería a examinar.

MoMo miró al médico: ―¿Qué me pasa?

El médico miró detenidamente los resultados de las dos pruebas y habló en voz alta: ―¡Estás embarazada! ¡Dios mío, he confirmado personalmente el diagnóstico de una hembra natural embarazada!

MoMo se congeló, la fría expresión facial de Roald se quedó en blanco por un momento, y al momento siguiente rodeó cuidadosamente a MoMo con sus brazos y lo besó ligeramente en su cabello verde oscuro.

―Acaba de vomitar. ¿Está enfermo? ―La voz de Roald adquirió una rara nota de tensión.

El médico preguntó por los detalles y luego sonrió: ―Está sano. Los vómitos durante el embarazo son una reacción normal. Si el físico del gestante es diferente, la reacción también lo es.

MoMo se miró el vientre y agarró la mano de Roald. Como estaba tan sorprendido, era un poco como un sueño. Miró al doctor: ―¿Es enserio? 

Doctor, ―Sí, estoy seguro.

KiKi gritó con alegría: ―¡Genial! ¡Felicitaciones, MoMo!  

El resto del grupo ofreció felicitaciones, y tanto MoMo como Roald estaban encantados.

El médico dijo lo que se debe y no se debe hacer y se fue. Los machos se quedaron en el jardín mientras las hembras comían lo que ya habían asado y hablaban mientras los machos cocinaban más.