Mine||Tom Riddle|| +18✔️

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El carruaje arrancó y las señoras iban hablando mientras que Astoria y yo solo observamos.

El carruaje llegó a la mansión Rosier. Excelente.

Nos ayudaron a bajarnos y caminamos hacia la puerta. Mi madre le dió algunos toques a la puerta y la señora Rosier habrío.

—Bienvenidas, pasen—nos dió una sonrisa y abrió más la puerta para que pudiéramos entrar.

Nos adentramos y vi que estaban las señoras Selwyn,Nott y Zabini, ¿por que todas usan vestido?

—Cabeza al alto,postura recta y no dejes que te digan nada, Gia —susurro mi madre disimulada mente, asenti.

Examine con mi mirada la mansión. Es bonita pero nada comparado a la mansión Parkinson.

Caminamos hacia donde estaban las demás, empezamos a saludar con un beso en la mejilla y una sonrisa

—Hola, señora zabini—me acerque hacia la mamá de Blaise dándole un beso en su mejilla para luego una sonrisa.

—Gia querida—hace lo mismo—,ya me enteré de tu compromiso con Tom—me da una sonrisa pícara.

«En el mundo mágico si que son muy chismosos»

—Si...—di una sonrisa de labios cerrados.

—Si Tom muere sé cómo yo, quédate con su dinero y luego te consigues a alguien nuevo—me susurra en el oído y me guiña el ojo.

Yo frunci el ceño al oir tal cosa riéndome un poco asintiendo.

La señora zabini era la más divertida para convivir, es como mi yo de grande.

Un día fuimos a una fiesta muggle, ella fue la primera en emborracharse y ya se estaba ligando a un chico.

—Señora Selwyn—le ofrecí mi mano.

—Gia—ella la acepta y me da una sonrisa fingida.

La señora Selwyn era la más víbora de todas aquí y de seguro me odia ya que yo me casare con Tom en vez que su hija.

Le solté la mano y saludé de último a la señora Nott, me senté en el sillón y cruce mis piernas.

Un elfo doméstico sirvió el té y llevó una bandeja de galletas.

Tome una taza para que luego me sirvieran el té.

No soy tan fan del té,prefería el café.

—¿Mi hija sería mejor señora Riddle no lo crees Merope?-habla la señora Selwyn y toma un trago de su té, mirando a mi suegra.

Abrí mis ojos como platos y quería reírme a carcajadas en ese momento, pero mantuve mi postura.

"No dejes que te digan nada, Gia"

Oi la voz de mi madre recordándome lo que me había dicho antes.

i madre me voltio a ver dándome a entender que hacer y yo tomé un trago del té para luego responder.

—Si tanto piensa eso porque soy yo la que se casara con Tom y su hija no?—emnarque una ceja.

Ella me miró con cara de odio y se callo apartando su mirada.

—Yo digo que Gia será la mejor señora Riddle—habla la señora Merope.

«Tu suegra te quiere eh»

Calla.

Ellas siguieron hablando de cosas que no me importaban y no me llamaban la atención, voltee un poco mirando a Tori para empezar una conversación.

—¿Y Tori tú quieres tener hijos?—pregunte un poco curiosa.

¿Que? Algo tenía que sacar.

Ella asintió-Quiero tener 3.

¿¡3!? Una mezcla de Draco y Astoria, aseguro que la profesora McGonagall a enterarse renuncia.

—¿Y tú?—me pregunta tomando un sorbo de su té.

—Tendría solo 1 para mantener el linaje pero no más—espondí.

No tengo mucha paciencia para lidiar con bebés y mucho menos si serán como un mini Tom, pero tal vez cambie de opinión después

Me recosté en el sillón y me estaba aburriendo. Si ser una señora poderosa en el mundo mágico significaba venir a fiestas del té aburridas ya no quería serlo.

Además soy lo suficientemente rica y poderosa para no poder venir tampoco.

Esto es lo más aburrido y le diría a mi madre.

"Ey madre vámonos que me aburro" Pero no me haría caso y me regañaría después diciendo que es importante venir a esto.

mi objetivo en la vida es ser como la señora zabini.