Suzuna no lo miró, siguió llorando ahí frente a él.

—... no podía acabar con los Uchihas yo solo, y el hombre enmascarado me ayudó. Uchiha Madara. —Suzuna alzó su mirada sorprendida. —Él sabe toda esta verdad, sabe que fue para proteger a Sasuke y por eso, necesito que él se mantenga alejado de mi hermano.

—Itachi...

—No te pedí ayuda porque no podía mancharte de sangre inocente... no podía obligarte a cargar con éste peso que he llevado durante años sobre mis hombros.

—¡Hubiéramos buscado una solución a ésto! —exclama totalmente molesta. —¡Te habría ayudado a encontrar la solución! ¡Juntos... juntos pudimos salvarlos a todos!

—Sé que hice mal en querer cargar todo por mí mismo y no confiar en los que me querían. —Itachi tomó el rostro de Suzuna frente a él. —Quería protegerte a ti también.

—Te lo supliqué... —comenta en un murmullo. —...te supliqué que confiaras en mí, que sin Shisui, yo podía ayudarte. Te supliqué que no hicieras una tontería...

—Pero la hice, y ahora Sasuke no debe enterarse de la verdad. Después de mi muerte... él regresará a Konoha, y yo necesitaré que estés ahí para que lo cuides.

Suzuna lo abrazó, no le importó subirse a él sobre el trono. Necesitaba sentirlo cerca porque sería la última vez que lo vería... necesitaba tenerlo a su lado en estos últimos momentos de su vida.

—No me abandones otra vez... —suplica llorando, ahora sí no podía detenerse. —No me hagas esto otra vez....

—Ya he tomado una decisión. —la abraza de vuelta. —Te saludaré a Shisui, estará feliz de saber que estás bien.

—No lo puedo soportar... duele... duele mucho.

Antes Suzuna lloraba de poco a poco durante los días y a veces porlas noches, pero ésta vez fue diferente, porque aunque quiso, no pudo detenerse. El dolor en su interior incrementó.
Cuando la gente hablaba de que le rompían el corazón, no parecía ser verdad hasta que ella misma lo estaba viviendo. Algo dentro de ella se rompería si seguía llorando de esa manera. Itachi no la alejó, seguía sosteniéndola en brazos con fuerza.

—Recuerdame siempre y estaré contigo, Suzuna. Te apoyaré desde el otro mundo.

Suzuna estruja la capa de Akatsuki del azabache, llorando con más intensidad.

—Te odio tanto...

—Eso no es totalmente cierto. —señala. Suzuna se separa un par de centímetros.

—Yo... te quiero tanto, Itachi. No te preocupes por la eternidad, porque la tendrás aquí conmigo en mi corazón. —se inclinó y recostó su sien en su hombro, trataba de recuperar su respiración pero no podía evitar seguir llorando. Y mientras Itachi acariciaba su cabellera, ella susurró cerca de su oído, mientras más lágrimas caían sin parar. —Tus padres estarán orgullosos de ti... —el cuerpo de Itachi se tensó. Pero ella no se detuvo. —... Shisui estará orgulloso de ti, todo el clan lo entenderá... al igual que tu hermano y yo. Podrás liberarte por fin. —sintió lágrimas que no le pertenecían a ella caer sobre su hombro. Suzuna cerró los ojos con fuerza cuando los brazos de Itachi la abrazaron con más fuerza. —Soy tan egoísta queriendo retenerte en éste mundo cargando con la muerte de tantos sueños perdidos, tanta culpa. Pero no te preocupes porque estoy aquí para tomar la batuta, cargar tu secreto por ti y que tu dolor por fin termine...

Nadie dijo nada más, abrazados duraron un buen rato. Era la despedida definitiva. Suzuna desprendió chakra curativo para que estuviera bien cuando se enfrentara a Sasuke y cuando menos se dio cuenta, quedó dormida sobre su cuerpo.

𝙼é𝚝𝚘𝚍𝚘 𝚄𝚌𝚑𝚒𝚑𝚊 . |𝑆𝑎𝑠𝑢𝑘𝑒 𝑈𝑐ℎ𝑖ℎ𝑎|Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt