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Atención: en la próxima parte hay datos usados cuales fueron unos tristes y catastróficos sucesos genocidas, no lo uso con la intención de burla, pero si te sientes ofendido al respecto con la mención, no leer.

- Torres gemelas

-Bomba Atómica.

Gracias. ~ Chocopocky~

USR-3

-muévete maldito gordo-
- kolkolkol yo no estoy gordo, mi cuerpo es así obeso capitalista.-
-yo no soy obeso!-
-¿no? Das asco a todos, si fueras mas culto leerías los informes, sabrías que encabezas la lista de mayor índice corporal-
-Es mentira!-
- aja, sigue ignorando ese gran problema de gordos en tu país-
-da igual, no es que lo que diga una bola de cebo como tu me ofenda, eres tonto HAHAHA-
- haaa bien.... ojala que con toda la tragedia del terrorismo en tu casa hayan hermosos fuegos artificiales en otro de tus celebres edificios de nuevo, seria algo fascinante de ver ¿no crees?-
Comento el Ruso en un agrio tono burlón.

-ustedes norteamericanos lloriquean mucho por eso...-

-oh Rusia... ¿Quieres otra guerra fría? Estoy más que preparado para dejar muchos de tus terrenos como Hiroshima y Nagasaki, las llamas arderán tanto que tu estúpido capitán invierno se pondrá a llorar y a suplicar a todos los dioses que existan para que los ampare-
Suelta el americano con cierta seriedad e irá, si bien un comportamiento muy raro.
-je~ así que planeas bombas atómicas, que poca creatividad, eso ya quedo muy en el pasado, yo prefiero hacer cosas mas divertidas como oír a tu pueblo gritando en agonía mientras mueren lentamente con una hermosa arma biológica, ¿debería usar un virus para causar la epidemia en toda América?... porque... ya no me pienso retirar para nada esta vez...

Advirtió con tono serio el Ruso con el flequillo cubriéndole media cara y una sonrisa de oreja a oreja. Claramente las auras oscuras hacían un ambiente muy denso en la habitación, las dos grandes ex super potencias desbordaban odio y rivalidad entre si, desbordaban un siniestro malestar.
-ammm-
Tosió el japonés no muy divertido por el anterior comentario del estadounidense que si bien le causaba un mal recuerdo y sufrir.
-Rusia-san... A-america-san... sacalos de ahí Japón, se van a hacer trizas, no necesitamos otra intervención... hai! Será lo me-
Pero antes de hacer algo, el extraño y elástico material que se asemejaba al cristal se rompió de la masiva presión.
-... Bueno, creó que salieron sin necesidad de ayuda-
El japonés estaba muy sorprendido y sin más se apuro a tomar notas donde escribió "no poner JAMAS a Rusia-san junto a America-san de nuevo.
- .... Ups -
Dice el norteamericano con un poquito de timidez, pues se había aguantado el aire y como ya no pudo saco la pancita pensando que nada malo pasaria, el Ruso con mirada baja va a la puerta para esperar que abran, sus jefes le dijeron que se portará bien, que no lastimara a nadie y él intentaría cumplir aun cuando quisiera reventar el cráneo del estadounidense contra la pared en ese momento.

ER-6
-España aléjate-
-lo siento Romano, no puedo-
El italiano se remueve y busca con los ojos una solución a este enorme problema, esto no era bueno, nada bueno para él, pocas veces soportaba las dosis del amor español y ahora... Le echaban una cascada del mismo . Mientras el italo se preocupaba muchísimo, el español solamente miraba la impaciencia de su compañero, él sabía que su querido niño siempre había sido nervioso cuando la gente se acercaba mucho... Extrañamente mas con el, aunque no le daba importancia, estaba un poco preocupado porque quizá el italiano estaba en muy mala posición lastimándose.
-cariño, tranquilo, te vas a lastimar-
-la-las piernas se me están entumiendo-
O vaya que era eso, el buen jefe debía solucionarlo, su Romanito estaba herido.
-bueno, intentemos movernos-
-ugh-
Los brazos de España se intentan deslizar por los alrededores aplastándose con los codos de Romano, eso le causaba un terrible dolor.
-Romanito, necesitas comer carne-
Ríe el español.
-Ah cállate... Espera ¿me estas diciendo huesudo? Tengo buen cuerpo idiota, los que no me conocen me han pedido de modelo para pasarelas-
El español lo intenta, busca una posición mas cómoda, pero siente que mientras más se mueve, la caja se hace más pequeña, suspira
-solo dije que quizá si necesitas unos kilos mas?-
Romano se indigna y frunce el ceño mirando los movimientos del español. Y por fin el moreno pasando los brazos, retrocede estirando la caja transparente como si fuera goma con muchísima fuerza bruta, toma las piernas de Romano y las abre (recuerden que estas se encontraban en el cuello del español), pero la caja era dura de estirar por lo que el español sin verlo venir se va de boca sobre la parte mas sensible del pobre e indefenso italiano.
-Eres muy sexi Romano... pero no te mates de hambre-

one-shot - El experimentoWhere stories live. Discover now