Huye Conmigo Aries [Todobaku]

1.Leo

Leo - Dragón (animal acompañante)

Con su sola presencia el dragón domina un lugar por el poder y la majestuosidad que representa; así mismo son las personas de Leo: imponentes, fuertes y poderosas.

Además, los regidos por Leo son considerados líderes innatos, pero suelen ser nobles y siempre buscan formas de demostrar lo mucho que valen.

No podría decir que estaba plenamente consciente de lo que sucedía a su alrededor, un dolor punzante azotaba sin piedad su cabeza haciendo que su vista se viera un poco brumosa, y los constantes cuchicheos de los demás, reclamando saber que cosa no ayudaba en lo absoluto.

Algunas miradas parecían juzgarlo, otras parecían preocupadas y unas pocas permanecían neutrales como siempre, por lo menos había una cosa que sí tenía clara y era que estaba en su mundo, no tenía idea de cómo había regresado y quien lo había traído, el dolor no le permitía aclarar sus pensamientos.

Por fin alguien se percató de su mueca de incomodidad, por lo que le permitió que regresara a su habitación para descansar, no se fijo quien le había hablado, pero simplemente asintió y salió de ese salón, de seguro había sido Leo, él siempre se preocupaba por el bienestar de todos y esto no iba a ser la excepción a pesar de todo lo que había hecho.

Lo bueno es que lo dejaron solo, igual sabían que no podría escapar, al menos no por ahora, sus poderes estaban casi agotados y necesitaba recuperarse lo suficiente para siquiera presentar pelea, aunque para este punto veía poco probable que pueda lograr su objetivo esta vez.

De repente y cómo si fuera un destello fugaz que cruzó por su mente le vino la imagen de alguien, eso hizo que diera media vuelta de inmediato y regresara corriendo al salón, agradecía que nadie se hubiera ido todavía y sin demora preguntó:

— ¿Dónde está Escorpión?

Los murmullos que habían estado escuchando sin parar se habían detenido abruptamente, tras esa simple pregunta. Todos giraron a verlo, muchos tenían una expresión desconcertada eso sólo aumentó su ansiedad por saber qué había pasado.

— ¿Dónde está? - volvió a preguntar impaciente.

— Katsuki - dijo serio Toshinori, el cuerpo del rubio ceniza se tensó, él solo lo llamaba por su nombre cuando algo grave había sucedido, tenía un mal presentimiento, sus manos empezaron a sudar y el dolor de cabeza que había empezado a menguar volvió a subir con más intensidad, haciendo que retrocediera unos cuantos pasos inestablemente, sin embargo, pudo permanecer de pie a pesar de eso.

— Dímelo - su voz apenas se escuchó.

— No sabemos donde está, solo te encontramos a ti y a su animal acompañante, que estaba a tu lado — explicó lo más claro posible.

— ¿Cinere? ¿Dónde está? - Una pequeña esperanza se iluminó en sus hermosos ojos rubíes y debido a la emoción parecía emitir pequeñas llamas abrasadoras que eran hipnotizantes o al menos eso le había dicho Escorpión.