Prologo.

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Era un día común en Tokyo, los rayos de sol empezaban a salir en el horizonte, con lo cual dió aviso a comerciantes y empresarios de levántarse. Pero en otro lugar, más específicamente en cierta casa las cosas eran diferentes.

—¡Kazumaa! ¡Hora de que despiertes, llegarás tarde a tus clases de nuevo!.

—¡Ya voy!. Pinche vieja castrosa—.

—¡Te escuché!.

Gulp.

Y si señores, esa era la vida diaria de Kazuma Satou, un típico estudiante de preparatoria y comenzaba su día como cualquier otro.

Levantándose a duras penas por todo el cansancio acumulado a causa de desvelarse toda la noche jugando videojuegos y leyendo manga.

Abrió sus ventanas dejando que el aire entre a su habitación, empezó a buscar ropa entre sus cajones y se dirigía a la ducha.

—¡Ya esta listo el desayuno!. ¡No te masturbes tanto en la ducha y baja rápido!.

—¡Ya te escuché mamá!.....¡Y no estoy haciendo tal cosa!.

- Horas después -

POV Kazuma.

Ay, cómo era desesperante esa mujer, no puede estar un solo día sin mencionar la palabra masturbación frente a mi, cada día mis sospechas de que mi lado pervertido lo saqué de ella y no de papá aumentan.

Con toda la pereza del mundo me dirigía hacia la preparatoria Axel, una renombrada institución de Tokyo. ¿Cómo estoy en un lugar así teniendo esta personalidad?, esa es la pregunta del millón, con mis notas promedio se me es difícil creer que estudio en un lugar así.

La vida da sorpresa, a veces es lo que dice la gente, y eso puedo comprobarlo yo mismo.

Las puertas eran visibles, estaban a menos de 5m de mi, hasta que divisé a una figura conocida.

—¡¿Que son estás horas de llegar Kazuma?!.

—Ya cállate Aqua y no grites, suficiente tengo con mi madre todas las madre todas las mañanas.

—¡¿Cómo se te ocurre tratar de callarme?!. ¡A mí!, ¡la excepcional Aqua!, ¡la que tiene a todos los hombres embobados con solo su camin—

—Ya Ya, te entiendo, solo dime lo que quieres y deja de gritar.

La persona frente a mi era mi amiga Aqua, una linda mujer peliazul de mi edad que conocí el año pasado en una convención de manga, se hace llamar a si misma como "diosa", gracias a un manga de peleas de dioses contra humanos en un cuadrilátero que leía, que la ayudo a adoptar está personalidad molesta.

—Quiero que me pases la tarea del día de ayer y del día anterior a ese, un mortal como tú debería sentirse honrado de darme tal ofrenda.

—Aja, no hice la tarea asique...adiós mujer con principios chuni.

Di dos pasos al frente y entre a la preparatoria, ni siquiera me tomé la molestia de girar para saber la reacción de esta. Ya que los gritos de rabia más los insultos hablaban por si solos.

—Aqui vamos.

La preparatoria Axel, como dije anteriormente es un lugar de sobrenombre y era percibido a simple vista.

Konosuba: Bendita sea está maravillosa compañera.Where stories live. Discover now