bad boy ━━ [#1] jeon jungkook

『 O84 』

Mamá es una locura, según por anécdotas que me ha contado papá.

Miré a mi costado, JungKook cabizbajo no había respondido ni con un asentimiento de cabeza, sólo seguía en su mundo de catástrofes.

Llegamos y Cassidy estacionó, viendo la casa unos segundos antes de hacer algún otro movimiento. Y es que ya si la ves de lejos, te dan ganas de dar toda la vuelta para no pasar frente a esa casa de la mal pinta que tiene. Sabes que algo mal hay ahí; o unos pollo mafiosos te atacan o un smeagol feo debe vivir ahí.

Habría que demoler esa...

—¡Jeon! —el grito de mamá me hizo reaccionar, dándome cuenta de que él la había desobedecido y salió lo más rápido del auto. Ella maldijo por lo bajo mientras se quitaba el cinturón— Tú espera aquí, Cleo June.

—Pero...

—¡Quédate en el auto! —me señaló y supe que debía obedecerla.

Cuando usa el dedo índice es mejor no rechistar.

Maldita sea. Estúpidas patas.

Ví desde la ventana a mamá salir corriendo detrás de JungKook.

Waw, nunca ví a Cassidy correr.

Apenas entró a aquella casa, la ansiedad y desesperación me consumían. Tenía miedo de lo que sea que se podría encontrar JungKook ahí adentro. Afortunadamente está con mamá y ella podría impedir que él reciba algún ataque de esa señora. Pero, ¿Y si se encontraba con una escena perturbadora?

Y justo cuando JungKook parecía estarse abriendo por fin. Pensé que de ahora en adelante sería más fácil, hasta JungKook había aceptado internar a su madre, pero de repente sucede todo esto.

No sé cuánto tiempo pasó, no debió ser mucho en realidad, pero en estos momentos me pongo impaciente y lo que es un minuto para mí se vuelve treinta.

No paraba de remover mis pies y restregarlos ligeramente entre ellos, con el cuidado de no hacerme daño. Los dedos de mis manos también jugeteaban con los botones delanteros de mi pijama, porque sí, aún estaba vestida de jirafa.

Solté un casi inaudible quejido cuando mi labio inferior ardió por la mordida que había arrancado la piel ya reseca en ellos y terminó abriéndome una pequeña herida. Pasé mi lengua sobre ellos como forma de hacerme un mimo, pero que sólo me daba ganas de seguir mordiéndome.

Al ver como JungKook salía encorvado y con una mano suya en su pecho me alteró.

Abrí la puerta del auto con tal de ver mejor qué sucedía. Mamá estaba con él tratando de hacerlo alejarse del lugar, pero pareciera que JungKook no podía caminar, le temblaban las rodillas y parecía que en cualquier momento iba a caer. Apenas su carita se levantó, vi lo enrojecida y empapada que esta estaba.

Oí perfectamente un grito ronco de él que hizo a un frío recorrerme de pies a cabeza. Y sin darme cuenta, mis ojos ya estaban lagrimeando.

No lo dudé cuando salí del auto, nuevamente tragándome el dolor de cada paso que lo veía insignificante comparado al que se oprimía como daga en mi pecho al verlo a él tan vulnerable, sabiendo que me necesita. No era necesario decirme nada para saber qué pasó y qué vió, lo había destrozado.