|𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐭𝐨𝐝𝐨| 𝐊𝐨𝐨𝐤𝐌𝐢𝐧

제 22 장

Las cosas no debían ocurrir así. No quería ser el otro, y es lo que sería porque JungKook aun estaba casado, por eso era tan importante su plan. 

Se recordó que por algo había calculado cada paso de su plan, plan que se había ido al carajo porque simplemente no entendía qué pasaba con el alfa. La esperanza lo llenaba cada vez que pensaba en que quizás era amor lo que sentía Kook por él, pero luego recordaba que hace solo unos días le decía lo mucho que ama a Anzu, su mujer. La mujer que lo traicionaba y manipulaba solo por dinero. 

¿Qué iba a hacer? Si le contaba a JungKook de la infidelidad de la chica ambos recibirían la furia, ella por obvias razones y él por haber manipulado esa importante información... y tenía miedo. Porque aunque Kook estuviera confundido, ganaría la esposa que amaba y que durante años fue perfecta y pudo haber cometido un error que quizás perdonaría, al amigo que deseaba y se había ido años.

El amor le ganaba al deseo. 

JiMin jadeó con ganas de llorar y vomitar, odiaba eso, odiaba haberse desviado de su plan, por esa razón pasó años pensando en como conseguir al hombre que amaba, porque este era el único que causaba inseguridades en él. Jamás había sido manipulador y calculador con JungKook, era su punto débil y por eso el motivo de su plan.

JungKook miró extrañado a JiMin cuando este se levantó de golpe y salió lo más rápido que pudo de la sala, tuvo el impulso de seguirlo pero decidió mejor darle espacio, sabía que probablemente aún debía dejarlo procesar lo ocurrido esa mañana.

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~Voy a volverme loco~

~Hyung! Calmate y dime que pasó ¿Estas bien? Estas más pálido de lo normal~  -Un preocupado castaño se mostraba en la pantalla del móvil-.

~No puedo... No puedo seguir Tae. Esta... esta mañana pasó algo, algo que me hace feliz pero a la vez yo... yo no...~  -JiMin sentía que no podía respirar, sus manos tiritaba y solo quería calmarse-.

~Escucha, respira ¿si? Primero trata de tranquilizarte, tienes los ojos llorosos~

~Lo amo, Tae... Lo quiero tanto que realmente desearía solo dejarme llevar y olvidarme que tiene esposa, olvidar que sé que esta lo engaña. Dios, olvidarme de mi plan, del detective, de que he sido tan patético que he tratado de ponerlo celoso contigo... ¿Y si luego simplemente me deja? ¿Qué haré?~

~¿Tuvieron sexo?~

~No... pero... algo parecido~ -Murmuró el mayor soltando un suspiro y cerrando los ojos- ~Fue con ropa interior~

~Okay, primero cálmate y mírame~  -JiMin obedeció y miró a la cámara- ~No eres patético, hyung... déjame terminar~  -Interrumpió el alfa cuando vio las intenciones de su jefe-.  

~Eres el omega más increíble que he conocido. Sí, ideaste un plan. Sí, contrataste un detective porque no confiabas en Anzu y necesitabas pruebas de lo que obviamente estaba ocurriendo. Sí, quizás has hecho otras cosas. Pero sé porque.. Eres un abogado fantástico, a tu edad haz logrado cosas que otros abogados hacen cuando llevan 10 años ejerciendo, eres un cazador cuando se trata de ganar en lo laboral, pero eres un cachorro asustado cuando se trata de amor ¿Y te digo por qué? Porque has amado a la misma persona durante años y en tu corazón te has mantenido fiel a él. La gente puede pensar que no quieres a nadie o que nunca lo hiciste porque disfrutaste tu sexualidad libremente, pero hyung eso está bien, y sé que lo sabes~  -JiMin sonrió cuando el menor lo hizo-