¿DOS POTTER?

Capitulo 12

Sábado 31 de Octubre, 1992 - KATHLEEN POV

Había pasado ya dos meses desde que habíamos entrado a clases. Me la había pasado sumergida en tareas y entrenamientos de Quidditch, estaba exhausta. Hoy sin embargo finalmente tocaba un descanso. Era Halloween, así que los maestros no nos habían dejado deberes para el fin de semana.

Junto a Daphne y Draco disfrutamos el festín, pero decidimos mejor irnos a la sala común cuando el profesor Dumbledore movió las mesas e invitó a los alumnos a bailar un rato.

Era casi medianoche e íbamos camino a la sala común, rezando por no toparnos a un maestro, o peor; a Filch.

-Despedazar... Rasgar... Matar...

Era esa voz de nuevo. Ya no la había vuelto a escuchar desde aquella vez en el Gran Comedor. Draco y Daphne ni se inmutaron y siguieron caminando, en serio no la escuchaban??

-Huelo sangre... Déjame despedazarte...

-Olvidé mi ehh varita e-en el Gran Comedor. Los veo en la Sala Común.- me di media vuelta y comencé a correr hacia la voz, tenia que averiguar lo que era.

-Matar... Es hora de matar...

Matar???? Quién iba a matar a quien???

Salí por un pasillo al tiempo que alguien más venia cruzando, y ambos caimos al piso.

-Harry!!

-Kathleen!!

-Eras tu??- dijimos los dos al mismo tiempo

-No, no era yo. Pero tú también la escuchas? La... la voz?

-Si! Dice que matará a alguien!!

-Harry! Kathleen? Qué haces aquí?- Ron y Hermione llegaron corriendo por el mismo pasillo que Harry

-Ella también escucha la voz!

-Ustedes la escuchan? Draco y Daphne no la escucharon

-Nosotros tampoco, pensé que Harry se volvía loco.

-Matar... Matar.... Matar

Harry y yo nos volteamos a ver y rápidamente nos levantamos del piso, comenzando a correr para alcanzar la voz.

-Chicos, no corran!!

Llegamos a un pasillo, nuestros pies salpicando el agua que se encontraba en el piso. Hermione y Ron llegaron detrás de nosotros, ambos exhaustos

-AAAAGHHH!!!- salté del lugar que me encontraba y me trepé a Ron- ARAÑAS!!!!

Una hilera de arañas cruzaba el pasillo y salían por una de las ventanas del castillo

-Kathleen, cállate!!

-Arañas??? Bájate y cárgame tu a mi!!- Ron se alejó de las arañas conmigo en su espalda, ambos sacudiéndonos en caso de que alguna se nos hubiera subido

-Pero que tienen ustedes dos? Compórtense!!

-Es que las arañas!!!

Ron y yo le teníamos fobia a las arañas desde que Fred había convertido su peluche y mi muñeca en arañas cuando teníamos tres años, después de que nosotros hubiéramos roto su escoba de juguete accidentalmente. Este no era un buen momento para gritar, pero no lo pude evitar.

-Sht! Cállense ya!- Harry nos fulminó con la mirada, suficiente para que yo me bajara de la espalda de Ron y ambos dejaremos de hacer ruido. De todas formas nos mantuvimos alejados de las arañas, por si acaso.

Mientras Harry inspeccionaba las arañas y el camino que formaban, Ron y yo nos protegíamos detrás de Hermione. Al hacerlo, volteamos a ver uno de los charcos frente a nosotros.

-Eso es...

-Sangre?

Nos dimos cuenta que lo que veíamos era el reflejo de la pared, así que volteamos hacia arriba. Harry soltó un jadeo sorprendido, pues en la pared, escrito con sangre se encontraba un mensaje;

-"La Camara de los Secretos ha sido abierta, enemigos del heredero... temed"

-Eso definitivamente es sangre

-Oh no...

-L-la gata de Filch

La señora Norris se encontraba petrificada, parecía estar huyendo de alguna cosa que ya no estaba ahí.

-Tenemos que irnos, ahora!

Jale a Harry de la túnica, pero ya era tarde. El festín había terminado y todos los alumnos tenían que pasar por ese pasillo para llegar a sus salas comunes. Al llegar a donde estábamos, todos comenzaron a murmullar. Colin Creevey levantó su cámara para tomar una foto, pero Fred la bajó con su mano, no era un buen momento.

En eso, llegó Filch

-Niños molestos, muévanse del camino, regresen al basurero de donde salie- al ver a su gata, se quedó estático

-Señora Norris? Potter! Tu mataste a mi gata!- apuntó a Harry con un dedo, preparado para lanzársele encima.

-N-no, yo no fui, así estaba cuando la encontr-

-MATASTE A MI GATA!! Y yo te matare a ti!!

Harry se cubrió con los brazos, pero antes de que Filch pudiera hacerle algo, escuchamos una voz

-Argus! -el profesor Dumbledore venia caminando por el otro extremo del pasillo, los profesores de Hogwarts detrás de él. Al llegar a donde estábamos, se vio sorprendido, pero rápidamente dijo- Todos a sus dormitorios, ahora.

Comenzamos a caminar junto al restro del alumnado, pero la voz de Dumbledore nos detuvo.

-Todos, menos ustedes cuatro.

Nos dimos la vuelta lentamente. Esperaba recordar no volver a seguir voces, ahorita estaría platicando con Daphne y Draco en la sala común, burlándonos de Pansy, sin preocupaciones...

-No está muerta Argus, solo petrificada.

Lockhart se abrió paso entre los maestros

-Vaya! Si yo hubiera estado aquí esto ciertamente no hubiera sucedido.

-Lo que no sé es como sucedió- Dumbledore ignoró a Lockhart, al igual que los demás

-Pregúntale a EL, él lo hizo- Filch apuntaba con su dedo huesudo a Harry, y el se posicionó detrás de mí, ocultándose.

-N-no, yo no lo hice, lo juro.

-Si me permite profesor, me parece que los chicos se encontraban en el lugar equivocado en el momento equivocado -el profesor Snape habló, arrastrando las palabras

Harry, Ron y Hermione se voltearon a ver confundidos, para ellos no era normal que Snape los estuviera defendiendo.

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Después de varios consejos de parte del director y la explicación de como despetrificarían a la señora Norris, finalmente nos dejaron ir a nuestra sala común.

No tenia ganas de irme yo sola a la sala de Slytherin, pero por suerte Snape se ofreció como jefe de la casa a acompañarme.

-Señorita Lupin, sí me permite preguntar, qué hacía con esos tres chicos, porque no estaba en el festín?

-Verá profesor, desde que me enteré que Harry era mi hermano, decidí pasar mas tiempo con él... Entonces íbamos camino a la sala común de Gryffindor, ya que a ellos no les molesta que yo esté ahí, y en eso vimos eso en el pasillo. Definitivamente fue un mal momento...

-Claro... Por suerte usted está bien, no sé qué haría si un alumno de mi casa se metiera en problemas, en especial una alumna ejemplar como usted. -llegamos a la entrada de la sala común y dije la contraseña.- Buenas noches señorita Lupin.

-Buenas noches profesor.