Andrew Potens antes Harry Potter, criado por una empresaria del mundo muggle; encaminado hacia la magia a temprana edad gracias a los Malfoy. Se encamina hacia el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería desconfiado de las intenciones de Dumbledore...
¨La hazaña sucede cuando alguien está en un despacho.¨
Andrew empezó a agarrar una carta sutilmente envuelta alrededor de la capa que le habían enviado, el papel parecía ser uno de los que el usaría para realizar un ensayo, exacto el papel no era importante, lo relativamente importante eran las palabras que contenía la carta sin firma pero con una letra no muy prolija.
Harry Potter
La capa de la invisibilidad es una reliquia de tu familia, ha pasado de generación en generación. En este momento es tuya, tu padre me la había prestado hace mucho tiempo no hubo momento oportuno para devolvérsela pero este día es mi regalo de navidad para ti.
Que lo disfrutes
- Que deshonra maestro te regalan algo que te pertenece y además no colocan el mínimo respeto de dirigirse a ti como Lord, a veces empiezo a perder mi fe en el respeto de los magos. Si todos fueran tan majestuosos como yo verías que te tratarían con respeto, por supuesto. (Dijo Agnes)
- Puede que tengas razón Agnes. (Dijo Andrew riendo sutilmente por lo dicho por su familiar)
- Por supuesto, por eso deberías escucharme más a menudo ¿Qué harás con la apestosa capa maestro? (Pregunto Agnes mientras movía la capa con su cola)
- Ya que te gusta jugar con ella deberías usarla tú por el momento. (Dijo Andrew sugerentemente)
- ¿Yo? En esta cosa apestosa que seguro se dejó de lavar desde tu bisabuelo. (Dijo Agnes indignada)
- Lo harás bien preciosa piensa en todo lo que descubrirás escondida, piensa en todas las ratas que no te verán venir. (Dijo Andrew)
- Suena tentador pero un día también quiero que estés debajo de esta pestilencia. (Dijo Agnes)
- Por supuesto, no dejaría la oportunidad de probar una reliquia familiar. (Dijo Andrew)
Fue de esa forma en la que Agnes terminaría usando la capa múltiples veces en ese mismo día para según lo que ella decía ¨acostumbrarse al hedor de los ancestros¨ aunque Andrew pensaba que en el fondo le encantaba la sensación de poder colarse en cualquier lugar sin ser percibida.
El día pasaba tan lentamente que algunos sentían que morirían de aburrimiento, en la casa Slytherin lo único intrigante era cotillear sobre los chocolates impregnados con una posición de amor, pues Draco había compartido la información del descubrimiento de su padrino sobre los regalos dulces que le habían dado a su amigo.
En otro lugar del colegio se podría decir que alguien se estaba preparando para una pequeña hazaña, aunque con tantas personas moviéndose en un solo lugar como lo era Hogwarts nadie se quedaría a mirar por mucho tiempo que sucedía ni a la persona que salió un poco herida.
- Hermione ¿En qué pasillo lo dejamos? (Pregunto Ron)
- No lo sé, si no gritaras tanto como para distraerme no lo hubiéramos perdido. (Dijo un poco enojada Hermione)
- No es mi culpa que él sea muy rápido y que tú no lo puedas seguir con tu mirada, ¿No que eras muy inteligente? (Dijo Ron)
- No es tampoco mi culpa que seas tan lento y molesto. (Dijo Hermione dándole un ligero golpe en la cabeza)
- Bien deja de quejarte, eres molesta; mejor encontramos al viejo murciélago. (Dijo Ron cansado de escuchar a Hermione)
- Bien. (Hermione sentencio disgustada)
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
En uno de los descansos
En un pequeño despacho se encontraban conversado dos personas, el despacho era tan estrecho que muchos pensarían como se puede mover una persona en ese lugar, los colores eran lúgubre nada demasiado notable, algunas telarañas por el techo, algunos ratones muertos cerca de un cesto donde una gata jugaba con maña con el animal que había matado.
Era un momento como cualquiera, un simple momento pero este no tendría los contenidos exactos de diálogos antes conversados ni tampoco los mismos sentimientos, tal vez incluso no duraría lo mismo que siempre.
- Pensé que no vendrías a verme hoy. (Dijo Filch)
- Pensé que no llegaría. (Dijo Andrew)
- ¿Mucho trabajo? (Dijo Filch)
- Muchas tareas créeme que a veces no sé cuándo tienen tiempo para darme los trabajos o para corregirlos, ¿Atrapaste a alguien?
- Tristemente ninguna de esas escorias fueron atrapadas por mis manos, al menos mi señora consiguió una presa. (Dijo Filch mirando como su gata empezaba a morder a un pequeño ratón)
Andrew suspiro y se estiro acomodándose mejor en el asiento gris en el cual estaba.
- Nunca entiendo porque no te vas, aprenderías seguro más cosas fuera de este lugar. (Dijo Filch de repente)
- Y yo nunca entiendo porque me lo sigues repitiendo. (Dijo Andrew)
- Es porque tu no quieres escuchar Andrew, entre toda esta mugre me gusta tenerte aquí pero no quiero que termines sumergido en este charco de podredumbre, si yo tuviera la oportunidad ya me habría largado de este lugar hace mucho, aquí está pasando algo Andrew, porque aunque no me lo digan sé que esconden algo los otros profesores en ese supuesto cuarto de la muerte. (Dijo Filch)
_ Sé que seguramente Dumbledore me contrato para demostrar que el tenia a todos en igualdad o ¿Capaz para demostrar que nadie era discriminado? Patrañas, si fuera así buscarían hacer mi trabajo más fácil en este lugar rodeado de magia, tal vez podría haber sido asistente en pociones. (Pensaba Filch)
- Lo sé, no te preocupes. (Dijo Andrew intentando de alguna forma restarle importancia a lo mencionado)
- Lo sabes y aun así no te largas, a veces me gustaría darte una detención para darte un poco de razón común niño. (Dijo Filch)
- No me regañes Filch. _ Porque eso haría que piense que es algo que haría un Padre. (Pensó Andrew por un momento)
- Mocoso aunque leas tanto se nota que tienes mucho por aprender. (Dijo Filch)
- Quiero escuchar otro argumento. (Dijo Andrew)
- Bien te daré otro argumento de porque en algún momento una persona va a terminar pensando que la sociedad en la que vive no es más que escoria, además le daré a ese cerebro tuyo algunas de las leyes de la vida. (Dijo Filch)
- No olvides decirme si esa persona puede cambiar de opinión. (Dijo Andrew)
