Color de rosas

33

Dos meses después.
Semana 15 de embarazo.

El embarazo iba perfecto. Harry estaba saliendo de su primer trimestre y las cosas iban bastante bien. Olimpya dejo los celos de lado y comenzó a amar la pansa del rizado, la cual de a poco iba creciendo. Las náuseas dejaron de aparecer hace una semana atrás y el omega estaba aliviado. Algo que no había extrañado en absoluto era vomitar todo lo que comía.
Louis estaba enamorado. Su novio brillaba por donde lo mirase y estaba hermoso.
Los antojos aún no habían empezado y el alfa estaba algo aliviado. Recordaba las cosas que su novio comía durante el embarazo de Olimpya y se le revolvía el estómago. Además, agradecía no tener que despertarse a la madrugada a cocinarle, aunque sabía que no pasaría mucho tiempo para que eso ocurra.
Sus amigos habían gritado de felicidad cuando les contaron del nuevo miembro de la familia, Niall por su parte había llorado, provocando que Harry llore, y cuando Olimpya y Lirio vieron a sus mamás llorando también se largaron a llorar, así que podemos decir que fue un día emotivo.
Ahora, al igual que aquel día, se encontraban con sus amigos. Habían decidido ir a la plaza para que los cachorros puedan jugar libremente y ellos puedan tomar unos mates.
Se encontraban sentados en una lona que Niall había puesto sobre el pasto, rodeados de comida que ambos omegas habían llevado. Harry se encontraba sentado entre las piernas abiertas del mayor con la espalda apoyada en su pecho. Louis besaba su cuello y mejilla a la vez que acariciaba su vientre, ya no tan plano, haciendo al omega sonreír bobamente.

-Zaynie quiero otro cachorro.- Pidió Niall sentado en el regazo del morocho quien escupió el mate que estaba tomando.

-¿O-otro?- Pregunto tosiendo.- Tenemos mellizos no sé si te acordas.- Dijo recuperándose y el rubio rodo los ojos.

-Culpa a Harry.- Respondió simplemente.- Es hermoso embarazado míralo.- El nombrado se sonrojo y su novio lo abrazo más fuerte.

-Te pusiste rojito.- Murmuro besándole la mejilla y ganándose un codazo de parte del menor.- Ey.- Se quejó y Harry rodo los ojos.

-Sos un tarado.- Contesto riendo.- Zayn dale embarázalo así estamos embarazados a la vez.- Pidió y Zayn rodo los ojos a la vez que Louis largaba una carcajada.

El alfa silencio su risa rápidamente y se puso de pie cuando vio como Olimpya se tiraba sobre Lirio tirándole del pelo.

-¡Olimpya!- Grito y la cachorra se quedó quieta sobre el cuerpo de su prima.- ¿Qué haces?- Pregunto enojado y la pequeña hizo un puchero.

-¡Es mala!- Grito la cachorra y recibió un cachetazo de parte de Lirio.- ¡Aia!- Grito cuando la pequeña manito se estampo contra su mejilla.

Iba a devolverle el golpe a su prima cuando Louis la levanto bruscamente del piso cargándola sobre su hombro.

-Harry vamos.- Sentencio el alfa sobre el llanto de su hija.

-¿Qué paso? ¿Por qué llora?- Quiso acercarse a su hija pero Louis se alejó.

-Se estaban pegando con Lirio, vamos.- Volvió a decir y el omega asintió.

-Perdón.- Se disculpó solo con Zayn ya que Niall había corrido hacia donde estaba su cachorra llorando junto a su hermanito.

-No pasa nada.- Respondió Zayn restándole importancia.- Después nos vemos.- Sonrió.

La pareja camino hasta el auto con una Olimpya que lloraba a los gritos en los brazos de su papá. Louis sin emitir palabra la subió a su sillita y la ajusto. Cerró la puerta y subió a su propio asiento y puso el auto en marcha.
A su lado Harry, quien no entendía mucho de lo que había pasado, se aguantaba las lágrimas y movía su pierna nerviosamente. El alfa lo noto y coloco la mano en su muslo para calmarlo, cuando Harry lo miro a los ojos no aguanto y rompió en un llanto silencioso.
El aroma de las feromonas tranquilizantes de Louis logró que sus nervios bajen y que su llanto cese, al menos un poco.
Para cuando llegaron a su casa, fue Harry quien tomo en brazos a su cachorra que ya no lloraba ya que se había quedado dormida en el camino.
Ambos suspiraron cuando entraron al calor de su departamento, sabían que tendrían una larga charla con su cachorra.

-

Harry estaba en el regazo de Louis disfrutando de sus caricias cuando escucharon a su cachorra despertar. El omega bufo nervioso y se paró a buscarla. Cuando llego a su habitación la simplemente la tomo en brazos, muriendo en silencio cuando ella se acurruco en su pecho enterrando la carita en su cuello.
Volvió al sillón donde estaba Louis y se sentó a su lado dejando a la cachorra en su propio regazo, quien se separó de su pecho y miro a sus papás.

-Olimpya.- Empezó Louis y ella lo miro marcando un puchero gigante.- Sabes que lo que hiciste hoy está mal ¿No?- La pequeña asintió suavemente.

-Te dijimos mil veces que a la gente no se le gruñe ni se le pega.- Dijo Harry viendo como los ojitos de Oli se llenaban de lágrimas.

-Pe-pero ella muy mala.- Hablo rompiendo en llanto.

-Sea mala o no, no te da derecho a pegarle. Te educamos mejor que eso Olimpya.- Dijo Louis en un tono más calmado.

-Además es tu prima Oli.- Hablo el omega llevando una mano a la espalda de la cachorra.- Ustedes se quieren mucho.- Ella negó rápidamente y abrazo a su mamá, rompiendo en llanto nuevamente.

-No la quiedo no, nunca no.- Sollozo en el cuello de Harry quien miro a su novio preocupado.

-¿Por qué no la queres cachorra?- Pregunto Louis bajito.- ¿Por qué se pelearon?-

-Li-Lili dijio papi ama bebe nuevo y Lili más que Oli.- Explico con lágrimas rodando por sus mejillas rojitas y su respiración levemente agitado.

Louis negó con la cabeza y tomo a la cachorra en brazos pegándola a su pecho.

-Es mentira eso mi amor.- Murmuro y le beso le frente.- Yo te amo mucho gorda, ya lo hablamos.- Ella asintió triste.

-Yo amo papi y quiedo que papi ame Oli.- Dijo con hipidos de por medio y el corazón de sus papás se partió.

-Gorda.- La llamo Harry.- Papá y yo te amamos más que a nada, nunca dudes de eso. Sos nuestra cachorrita Oli ¿Cómo no te vamos a amar? Sos lo más importante que tenemos.- Agrego y le corrió el pelo de la cara.- Te amamos pupina.- Le beso la nariz haciéndola sonreír.

-Te amamos muchísimo.- Dijo Louis imitando la acción de Harry y besándole la nariz.

-¿Para siemple?- Pregunto jugando con sus deditos y sus papás rieron.

-Para siempre.- Respondieron Harry y Louis al unísono y la cachorra rio.

Abrió sus bracitos y abrazo a los dos a la vez haciendo que ambos mueran de ternura. Cuando se separaron la atacaron con besos y cuando la guerra termino decidieron que sería una tarde de películas.
Olimpya se la paso de un regazo al otro, abrazando a sus papás todo el tiempo, y ellos, ellos la amaban y no podían creer lo grande e inteligente que estaba su cachorrita.