INVISIBLE

Capítulo 69: The Icing On The Cake

Harry miró a Remus con curiosidad, jurar un Voto era una de las piezas mágicas más serias que uno podía hacer/decir en el mundo mágico. Al volverse hacia Severus, se dio cuenta de que el mago lo estaba contemplando. Significaba que tendría que aguantar al hombre; aún no le había perdonado que lo ignorara durante su tercer año en Hogwarts. Podía vivir con Sirius, pero ¿Remus Lupin? Si eso ponía fin a la guerra, tendría que sonreír y soportarlo, supuso. Tratar con él no significaba que tuviera que caerle bien, ni que tuvieran que hacerse amigos o, Dios no lo quiera, empezar a gustarse.

-Yo también lo haré-, declaró Sirius, obviamente Snape había aprendido más información de Slughorn vital para los esfuerzos de la guerra, y prefería saber y hacer un voto que estar en la oscuridad. Horrocruxes, ¡apenas podía creer que Voldemort hubiera creado uno! Era la magia más asquerosa del mundo. ¿Qué podría haberle dicho Slughorn a Snape? El mago era amigo de Dumbledore, en todo caso, ¿por qué el viejo Sluggy no se lo había dicho a Albus y sí a Snape? A no ser que Snape hubiera coaccionado la información para él, eso sería lo más lógico. 

-¿Por qué iba a hacer eso?- afirmó Severus con frialdad, mirándolos con una nueva perspectiva.

-¿Qué te dijo?- preguntó Harry, con la curiosidad a flor de piel. Intentando evitar pensar en el hecho de que había sido un Horrocrux toda su vida. Realmente le daba escalofríos, le daban ganas de vomitar, de intentar limpiarse, irracional, lo sabía, pero las emociones siempre eran así, no se podían controlar. Se preguntaba si la sensación de maldad de ser invadido le abandonaría alguna vez.

-Hay más de los que habíamos previsto al principio-, dijo Severus con gravedad, volviéndose hacia Harry, con toda su atención puesta en el adolescente. Preocupado por cómo se tomaría Harry las últimas noticias, pero como siempre se mantuvo fuerte ante el adversario.

-¿Más?- afirmó Harry, -¿Sólo cuantos más?-.

-Si hizo lo que quería, entonces tiene un total de siete piezas por ahí, incluyendo la parte que tiene en su cuerpo-, dijo Severus con gravedad.

-¿Seis Horrocruxes? Maldita sea-, exclamó Sirius en voz alta.

-Bueno, tenemos uno, una posible localización de otro, lo que significa que sólo tenemos que encontrar otros cuatro... podría ser peor- afirmó Harry pensativo, el investigador que lleva dentro saliendo a jugar.

-Uno ha sido destruido, otro lo será en unos momentos y la posible localización de otro- corrigió Severus.

Harry lanzó a Severus una mirada de puro pánico y miedo; no quería que nadie supiera que había sido un Horrocrux o que era el Niño que Vivió.

-El diario que destruiste durante tu segundo año-, explicó Severus, -es como Dumbledore se enteró de ellos-.

-¿Lo sabe?- respondió Harry sorprendido.

-Efectivamente-, dijo Severus con cansancio.

Harry frunció el ceño; había algo en la conversación que le daba vueltas en la cabeza, ¿qué podía ser? ¿Por qué le recordaba algo? Se sacudió, no debía ser importante si no podía pensar en el por qué, seguramente. -Muy bien, entonces son tres Horrocruxes los que tenemos que encontrar, entre todos seguro que podemos descubrirlos. Es sólo cuestión de averiguar patrones, sus asesinatos podrían ayudarnos en ese sentido, ¿y sabemos a quién ha ido a matar personalmente? ¿Objetos que han desaparecido de los lugares? Tendremos que retroceder cincuenta años y empezar por ahí, el diario fue obviamente el primero- dijo Harry pensativo.

-Siempre investigador-, dijo Severus con ironía, impresionado con el enfoque de poder hacer que Harry estaba tomando, pero a menos que quisieran arrodillarse a los pies del Señor Oscuro y postrarse, no tenían otra opción que luchar hasta el último aliento.