El Nuevo

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Al darse cuenta del hambre que tenían, salieron al pasillo. Para su sorpresa, y el pánico de muchos, todos los cadáveres que hacia solo media hora se estaban pudriendo ahí habían desaparecido. Era imposible, si alguien los hubiera quitado, les habrían oído. Y ahora no había rastro de ellos... ni olor... nada. Fue algo que no ayudó a mantener a los demás tranquilos. Era normal tener miedo en una situación así, al fin y al cabo, después de haberse mentalizado de que "todo había acabado", dolía mucho más el engaño de ver que todo seguía siendo una pesadilla.

Sólo podían volver a aquella habitación y seguir hablando con Aris, tal vez él si que sabía algo.

Por mucho que avanzaba a conversación con el chico de ojos azules, sólo sacaban datos similares a los que ya conocían. Había vivido el mismo infierno que ellos, y de alguna manera, eso le hacía dejar de ser sospechoso. La única diferencia era que en su mayoría eran chicas y que sólo él era chico.

Minho y Newt eran los encargados de interrogarlo, pero llegó un momento en que aquel supuesto interrogatorio pasó a ser una tranquila conversación. Thomas les observaba. Pensaba en Teresa, pero estar sentado junto a Newt y de vez en cuando sentir un roce en su hombro por su parte le hacía posarse en una nube. Tenerlo ahí, tan cerca y no poder hacer nada. Aris sólo le miraba a él. Era normal, Minho era el poli malo, y la mirada de Newt siempre era más cálida y tranquilizadora. Aun así, llegó un momento que hasta le molestó que lo mirara tanto rato. Era como si lo analizase. O como si lo conociese de algo.

-Supongo que podemos parar ya el interrogatorio.-dijo Minho.- Eh, Thomas, ¿sabes algo de Teresa?

-Aun nada.-dijo intentado sonar tranquilo, no quería hablar de ella en presencia de Newt, le resultaba muy incómodo.- Creo que deberíamos ir a buscar algo de comer, lo que sea.

-Está bien... ven conmigo.

Los dos chicos se levantaron, pero antes de salir por la puerta, la voz de Newt les hizo girarse para ver qué pasaba.

-¿Qué llevas ahí, Aris? -había dicho, levantandose de la cama y tratando de bajar un poco el cuello de la camiseta del chico. Este le había apartado la mano antes de que pudiera haberlo hecho.

-Nada.

-¿Qué mierdas llevas?

-Enséñaselo.-dijo Minho retrocediendo hacia él.

-Os he dicho que na...

Newt aprovechó el despiste para abalanzarse sobre el chico, tumbándolo en la cama. Colocó las manos de este cruzadas sobre su cabeza, y las sujeto con un brazo. Con el otro, tiró de la camiseta de Aris y leyó.

Las pruebas,lo no contadoWhere stories live. Discover now