El Fuckboy está ¿enamorado? ♡KookTae♡

¡Viernes de hornear Cupcakes!

Retiro su ropa hasta quedar en ropa interior, primero se colocó el pantalón algo holgado de la pijama con estampado de conejitos junto con zanahorias. Cuando iba a colocarse la camiseta escucho sonar su teléfono, soltó un suspiro y busco el teléfono en su mochila, lo saco y sin ver quién era contesto.

— ¿Quién es? — pregunto

— JungKook, soy yo. Baekhyun, ¿No me recuerdas?

— Ah sí. ¿Qué necesitas?

— Estoy en la fiesta de MinJae y la mayoría de las personas dicen que no vas a venir, ¿Es cierto?

— Es verdad, no pienso ir.

— ¿Jeon Jungkook? ¿Eres tú?

— ¿Solo llamaste para eso? Si es así, voy a colgar

— ¡Espera! No cuelgues, solo una cosa más. ¿Que estás haciendo o donde estás?

— Eso es algo que a ti no te interesa, Baekhyun

— Solo es curiosidad... Antes nunca faltabas a ninguna de las fiestas de MinJae y ahora de la nada no quieres venir

— Escucha Baekhyun, me gustan las fiestas de MinJae y me encantaría estar ahí, pero justo en estos momentos me estoy divirtiendo. Adiós

Terminó la llamada y se colocó la camisa de manga corta que tenía un estampado de conejo en el pecho. Cuando iba a salir de la habitación vio a TaeHyung parado en la puerta con la cabeza gacha.

— Osito... — dijo bajito

— Sin querer escuché tu conversación... Lo siento — jugo con sus dedos

— ¿Por qué te disculpas? — cuestionó acercándose al menor para abrazarlo

— Dijiste que te encantaría estar en una fiesta de un tal MinJae, sin embargo estás aquí conmigo — contesto

— Osito, no te voy a mentir. Antes de conocerte me la pasaba en fiestas pero ahora solo quiero estar contigo y eso me hace muy feliz, el simple hecho de estar contigo me pone feliz. Así que no te sientas mal ni te disculpes, mejor hay que ir a hornear Cupcakes — hablo con una sonrisa

TaeHyung asintió feliz

— Kookie, hay que hablarnos siempre con la verdad — sonrió — prométeme que no me ocultas nada — miro los ojos de JungKook mientras extendía su dedo meñique.

Y ahí estaba el problema, JungKook si le ocultaba algo a TaeHyung. Nunca le comento que él es... Bueno era un Fuckboy que tenía sexo con diferentes chicas todos los días y que sus antiguas relaciones que tuvo solo eran por apuestas o por simple diversión. Nunca le dijo nada por temor a que TaeHyung no lo aceptará y ahora que por fin eran pareja no le podía decir, ¡TaeHyung terminaría con él!

— Te lo prometo — engancho su meñique con el contrario

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— Pruébalo — le dijo TaeHyung, el pelinegro probó el Cupcake

— Sabe delicioso, eres el mejor en la cocina — halagó

— No digas eso, Kookie. — tapo su cara roja

— Pareces un tómate — se burló de su novio — un tierno tómate

— No te rías — hizo un puchero

— Okey, ya no me burlo — beso la mejilla de TaeHyung.

— Ahora que horneamos cupcakes hay que ver una película en mi cuarto mientras los comemos — sugirió el menor.

— Me parece una fantástica idea.

Ambos se pusieron a limpiar la cocina, juntos lavaron los trates que utilizaron, pusieron los cupcakes en un plato para llevárselos a la habitación. Miraron una película juntos pero a mitad de la película TaeHyung se quedó dormido, asi que JungKook apagó la laptop, la puso en el escritorio del menor después cobijo muy bien a su osito, dejo un pequeño beso en la frente del menor y finalmente él se acomodo en el colchón inflable que estaba en el piso, no era incómodo al contrario era suave, se cobijo y cayó dormido.

En la mañana se despertó y a su lado estaba su osito, lo movió para despertarlo.

— Osito... ¿Que haces aquí? Deberías estar en tu cama — habló, viendo cómo su novio abría lentamente los ojos.

— En la madrugada tuve una pesadilla, así que me vine a dormir contigo.

— Mi tierno osito — beso los labios de TaeHyung.

Desde hoy, JungKook adoraba los viernes y no precisamente por las fiestas que su amigo organizaba. Ahora los viernes ya no son de ir a fiestas, ahora son viernes de hornear Cupcakes.