Mi primera vez

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SHU

— Te amo mucho hijo — esas palabras las escuchaba diario, desde que tenía memoria

¿Eran falsas?

Su obligación era decirme eso constantemente que solo parecía algo sin sentido y repetitivo. No mostraba una expresión verdadera, solo una simple sonrisa falsa. Tenía miedo de abrir los ojos y ver ese rostro sin emoción todas las mañanas, que me parecía un asco

Mi padre sólo le importa su bien común y su maldito dinero. Era su hijo y nunca oí un ¿como estás? De su parte. Creí que solo nací para satisfacer sus intereses como parte de esta familia. Solo se comportaba de forma amable delante de otros y frío y sombrío delante mío y mamá

Conocí a Lui desde siempre y el era mi salvación a mi mundo oscuro, era mi luz. Lui es mi amigo más preciado para mí que nunca intente nada malo. Su sonrisa e inocencia era lo único bueno en este podrido mundo. Me sentía amado en su casa que quería estar siempre ahí, ser abrazado por alguien que no es de mi sangre y que me trata mejor que los que si son, es algo ilógico, lo era para mí. Ver como los padres de Lui consentía a su hijo y el solo era frío a sus sentimientos hacía ellos, me producía enviada al ver algo que siempre he añorado y que él no valoraba... hasta que mi vida cambió al igual que mi forma de pensar

— ¡TE DIJE QUE LO MATARÁS! — escuché un grito en una de las habitaciones, bajé para ver que es lo pasaba — ¡TENÍAS UN SOLO TRABAJO, SOLO ESE ESTUPIDO TRABAJO! — la voz de mi madre se hacía más cerca que solo entre abri la puerta para ver — ¡ERES UN IDIOTA! — recalcó con furia. Mi madre al borde de la furia total y enfrente suyo aquél tipo que era el mejor amigo de padre que solo observaba a mi madre cansado

— Tranquila tengo una oportunidad más para acabar con él, y que todo este dinero sea nuestro — habló avanzando hasta mi madre para sujetarla de la cintura

— Bien, si no haces tú trabajo será el fin para ambos. Quiero deshacerme de él y ser libre — le dijo. Por alguna extraña razón quería llorar, y olvidar eso pero lo que paso después... ver a mi madre tener sexo con esa persona que estuvo a lado de mí padre fingiendo amistad, me producía ganas de vomitar

Salí corriendo y olvidarlo pero jamás lo olvidé

Los días pasaron como siempre lo habitual, mi madre ya no iba a mi habitación a decirme esa palabra que odié tanto salir de su boca. Una noche me quedé en casa cuando padre salió de emergencia pero sufrió un accidente que salió ileso. La misma noche que dieron de alta a mi padre. Mi madre cometió el asesinato

Al escuchar de nuevo eso gritos, no quise ir a ver pero los fuertes sonidos me producían un miedo que salí corriendo y ver exactamente el momento cuando mi madre asfixió aquél hombre con una simple corbata que apretaba su cuello con fuerza. El hombre cayó al suelo para salir de ahí pero mi madre tomó un cuchillo de la mesa más cercana clavandolo en su pecho

— Te dije que conmigo no se juega, me engañaste — fue lo último que escuché de mi madre al ver como volvió para estrangular a ese tipo con sus propias manos como una loca

Mi padre llegó en ese momento presenciando ese terrible suceso. Desde entonces todas las noches recuerdo ese terrible momento llorando solo en un rincón. Tenia miedo de salir y ver el lugar donde mi madre tenía las manos llenas de sangre... nunca la volví a ver hasta hace poco