CAPÍTULO 1

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PoV Bibiana.

Odio la masividad de gente que hay en los aeropuertos. Encima llego tarde. Anoche me la pasé leyendo un libro que no me puedo llevar qué tenían en la biblioteca de Barcelona.

Me dirijo a la sala de embarque. Aún no han cerrado las puertas, qué alivio. Espero que me toque una fila vacía, con todas las movidas del COVID19, siempre hay huecos entre los asientos. Me gusta sentarme al lado de la ventanilla del avión. Siempre viajo en el avión de papá. Esta vez se ha olvidado de qué tenía que viajar hoy. Tampoco es tan malo viajar en turista.

Cuando llego a los asientos, veo que hay un chico escuchando música apoyado contra el asiento. No quiero molestarlo así que paso por encima de sus pies para llegar a mi asiento.

Me acomodo, me pongo los auriculares y saco la tableta digital para leer.

El comandante y todos nosotros les damos las gracias por elegir este vuelo de la compañía europe airlines con destino París, Gracias por su atención y feliz vuelo.

Aproximadamente habrá pasado algo más de hora y media para llegar a París.

Me espero a que la gente vaya saliendo para tener más espacio. Odio chocarme con gente porque sí.

Papá me había avisado que el chofer iba a venir a por mi. Así que lo espero sentada en una de mis maletas.

Pasan más de dos horas e intento volver a llamar a mi padre porque todavía no ha llegado y esto nunca me ha pasado.Esta vez sí que me coge el teléfono.

-A ver papá ¿No has enviado a nadie a buscarme? - Me extraña mucho que mi padre no me haya enviado a nadie a recogerme. En el momento que mi padre iba a responderme, veo a un hombre con un cártel en el que pone Durand en letras grandes y desenfadadas. - Nada, nada, ya está aquí. Cada día tienes un chófer distinto, nunca los reconozco. Bueno padre, hablamos cuando llegue.-

Le hago señas al chofer para que se acerque a mi, ya que tengo muchísimo equipaje. Se acerca a mí, y me pregunta - ¿Durand?-

-Emmm ¿quién iba a ser sí no? Bueno, ayúdame con mi equipaje.- Es extraño la muy notable poca experiencia de este chofer. Mi padre nunca coge a novatos. Sé toma muy en serio mi seguridad y la seguridad de toda la familia.

- Claro señorita Durand, me esperaba que fuera hombre.- Me mira mientras está poniendo todo mi equipaje dentro del cutre coche que tengo delante. Lo miro muy seriamente y se disculpa por la barbaridad que me acaba de soltar. Cuando llegue a casa hablaré seriamente con papá.

Me subo al coche. Llevo todo el curso esperando el verano, por fin he acabado el año. Estudiar historia del arte es agotador. De todos modos no me salvo. Me he matriculado en un curso que ofrece la universidad privada de París sobre los tesoros que ha dejado la mitología en este precioso país. Nadie está de acuerdo con la carrera que estoy estudiando,puesto que tarde o temprano acabaré heredando las empresas de mi padre. Sé empeña en que me haga cargo de las empresas porque cree que es algo que me importa o al menos debería importarme.

Llamo a mi padre, pero me salta el contestador. Siempre está de llamada en llamada. Me pongo mis auriculares,necesito pensar en muchas cosas.

Si, la De la Villa en ParísWhere stories live. Discover now