Amor de Guerra (Severus Snape X Tú)

Capítulo 20

_____ vio a Severus Snape inclinándose sobre ella; notó la sorpresa en la mirada del pocionista cuando éste reconoció su rostro a través de la máscara que se había ladeado cuando cayó en la tierra del bosque. Quería escupirle todas las maldiciones que pudiera antes de morir, pero solamente salieron de sus labios enormes gotas de sangre.

El pocionista le ordenó callar antes de sacar su varita; la chica creyó que tal vez Snape se había apiadado de ella y le daría una muerte rápida, por lo que cerró los ojos para esperar su final. Después de todo no le temía a la muerte, sino a lo que la obligaban a vivir.

N.A.: La Rayis total Drama Queen XD

Se sorprendió al escuchar un suave canturreo a su lado, y como poco a poco el dolor de sus heridas desaparecía. Creía que, tal vez, así se sentía la muerte; si así era, no comprendía porque la gente le temía tanto, ya que era mucho más pacífica y gentil de lo que había imaginado.

Abrió los ojos, expectante sobre lo que podría ver. Se encontró con las copas de los árboles en cuanto su visión se aclaró; realmente estaba sorprendida, ella no le temía a lo que había después de la muerte, así es que no pudo haberse convertido en un fantasma, ¿o sí? Bajó sus ojos a su cuerpo, y se encontró con sus mismos brazos, sus manos, las piernas visibles porque su túnica se había subido un poco; vio su máscara de mortífaga tirada a un lado suyo, junto a su cabello sobre la tierra del bosque. Alzó sus ojos, y se topó frente a frente con Snape, quien aún la apuntaba con su varita.

Antes de que el profesor pudiera reaccionar la chica se levantó de un salto; se alejó un par de metros del hombre con pasos trastabillantes, pero ignoró su debilidad para sacar su varita y apuntar con ella al pocionista.

—Quédese quieto, y no tendré que atacarlo.—murmuró _____.

Tenía la garganta seca y la voz temblorosa, pero se contuvo de toser para aclarar su garganta; no debía dar ninguna muestra de debilidad si quería sobrevivir.

—Acabo de salvarte la vida. Deberías mostrarte más agradecida.—contestó Severus.

—Nunca se lo pedí. Además, ¿para qué lo hizo? ¿Va a llevarme con Dumbledore y su Orden para sacarme información del Señor Oscuro? ¡Le advierto que prefiero morir antes que traicionar al Señor Oscuro!

Severus bajó lentamente su varita; sabía que Voldemort había comenzado a desconfiar de su lealtad, y cada paso que diera debía ser cuidadoso. Que desapareciera su segunda al mando dentro de los terrenos de Hogwarts sería demasiado sospechoso, por eso le había salvado la vida, además de que sería ventajoso que ella estuviera en deuda con él; o al menos eso era lo que quería pensar.

—¿Por qué habría de entregarla a Dumbledore? Él no sabe que usted está aquí, así es que no pondrá en peligro mi trabajo de espía si la dejo ir.

_____ no bajó su varita ni relajó su guardia a pesar de que Snape había guardado su varita y la observaba con las manos entrelazadas tras su espalda. Se observaron fijamente durante lo que se sintió como una eternidad; Snape se veía tranquilo, pero la chica tenía dentro de sí una pelea para decidir si era conveniente dejar con vida a Snape o si debía matarlo ahí mismo. Al final guardó su varita, ya que llegaron pensamientos más importantes a su mente; debía llevarle al Señor Oscuro la información que había conseguido lo más pronto posible, además de vengarse de la Orden del fénix por haber frustrado su misión y casi asesinarla (aunque en realidad Moody solamente había desviado los ataques de dos mortifagos que, por casualidad, habían ido a parar a ella. Pero aunque no hubiera sido intencional, no hacía que sus deseos de venganza disminuyeran).

—En ese caso, nos veremos en clases... Oh, y espero que nadie se entere de quien es Dove debajo de la máscara; eso no le gustaría al Señor Oscuro, y como su segunda al mando tendría que encargarme de quien ventiló la información, ¿de acuerdo?—susurró la chica mientras guardaba su varita y se quitaba la túnica bañada en sangre y la máscara rota.