Capítulo 4:

84 1 0
                                    

"Y hablando figuradamente... se sentía completamente abastecido. Enriquecido de un millón de sabores de capas impenetrables sobre su piel, como si se tratase de nada menos a una flor del infierno a punto de abrir sus grandes esporas. A la espera de cernir su hambre de placer y conocimiento humano sobre él." 

Probablemente hubiese decidido algo mejor que esto. Cualquier ambiente obstaculizado entre ambos no serviría de nada, al contrario, pero sus sentidos agudos a veces le engañaban. No le era posible dar con una conversación normal, no con personas que no compartían su misma inteligencia y extraño sentido del humor.

Como cualquier otro hombre; no podía siquiera llamar su atención, de la manera romántica ni de la sexual. Todos y cada uno de ellos fallaron, perdieron. Antes de siquiera comenzar a entablar una conversación. Era obvio que ninguno se llamaría a si mismo como "digno" de entrar a su lado, por lógica era un ser muy alejado de sus posibilidades, ¿Cómo un simple mortal de naturaleza pecadora podría hacerle cambiar de opinión...?

¿Qué es lo que pretendía hacer? ¿Vestir siempre esa máscara de persona amable? 

Esta mentira acabaría por terminar muy pronto, estaba decidido a ver más allá de lo que ese hombre poseía, y acabar con su dulce engaño sería una satisfacción enorme a sus problemas. Claro estaba que cuando se encontrasen cara a cara no volvería a dar más de su persona, porque efectivamente, ya no sería parte de él mismo. 

And So It BeginsWhere stories live. Discover now