El brillo de tus ojos - hisoillu

⭐✨YOU'RE RISING!✨❤️

¡Hola!
Es primera vez que escribo sobre esta pareja y estoy algo nerviosa.
Ocurre en un universo alternativo más cotidiano como el nuestro, por lo cual no hay nen ni cazadores ni asesinos profesionales. Ambientado en un ambiente escolar, se modifican las edades para lograr que los personajes interactúen en este universo (Hisoka e Illumi tienen la misma edad. La diferencia entre Illumi y Killua no es tan grande).
Como hay uso de sustancias, hay personajes OoC.
Si a pesar de todo lo que mencioné están interesad-s en leer, bienvenid-s sean.
Espero que lo disfruten~

Alguna vez Illumi escuchó a dos adultos mayores conversando en una plaza. Él estaba tomando un respiro de cinco minutos para después seguir con sus lecciones de álgebra avanzada. Los hombres recordaban viejas memorias de su juventud, y no pudo evitar escuchar una frase que le llamó la atención.

– ¿La recuerdas? Ya sabes que los ojos son las ventanas del alma

El joven de largos cabellos azabaches jamás había reparado en lo oscuros y apagados que eran sus ojos. Es más, nunca había reparado en su físico de ninguna manera que no fuese por beneficio de seguir desarrollando sus habilidades. La infinidad de libros que leer, deportes, lecciones y actividades extracurriculares a las que era sometido diariamente le hacían estar al pendiente de dormir y comer bien, hacerse chequeos médicos constantes y tener todos sus horarios en regla. Nada se escapaba de su control, y mucho menos del control de su familia.

Observar sus ojos a través del espejo había despertado la primera gran intriga del adolescente. Desde pequeño fue sometido a la fuerte disciplina que caracterizaba a sus pares. Al ser el hijo mayor de los Zoldyck, mucho peso cayó sobre sus hombros desde temprana edad para ser el heredero del imperio que su familia había construido. Sin embargo, cuando nació su hermano menor Killua, toda la atención se puso sobre él. Illumi seguía siendo presionado para mejorar cada día en todas las categorías posibles, solo que ya no hablaban de él con el mismo interés. Todo el foco se había ido sobre Killua al descubrir sus padres en él ser un diamante en bruto, muchísimo más inteligente y hábil que Illumi. No importaba cuánto se esforzara, Illumi siempre terminaba siendo comparado con Killua pese a que apenas era un niño.

– ¡Míralo! Apenas tiene tres años y mira lo listo que es. A esa edad tu aún jugabas con bloques

Ese tipo de comentarios jamás inmutaron su rostro. Había crecido con la estoicidad de su lado, convirtiéndolo en un chico que apenas mostraba gestos en su rostro. Aprendió a suprimir sus emociones lo suficiente como para no mostrar debilidad ante cualquier asunto que se le atravesara. Colocaba todas sus frustraciones en seguir trabajando duro y extirpar todo ápice de dolor de sí mismo.

Por supuesto que sus padres sabían que Illumi era una bomba de tiempo. Notaban en él que su perfeccionismo y sus ansias de superar a Killua lo convertían en alguien peligroso. Esa era la verdadera razón por la cual no permitirían que el azabache fuese el heredero.

Pestañeó varias veces antes de alejarse de su reflejo. Sin amigos, sin emociones y sin objetivos propios más que seguir siendo útil para su familia y proteger a los suyos, se preguntó: "Si los ojos son las ventanas del alma, ¿significa que no tengo una?"

Illumi continuó su vida sin volver a preguntárselo. Asistía a todas sus clases de manera regular, además de los entrenamientos y talleres que le asignaron para él. Ninguno le gustaba de sobremanera, su mayor emoción era saber que había superado su marca anterior. Era especialmente bueno con las flechas y los dardos, su precisión en el blanco era de envidiar.