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Capítulo largo, espero que les guste y no se aburran :3

Estaba cerca de cumplir dos meses sin ver a su alfa, y la espera cada día se volvía más agobiante. Sus bebés lo ayudaban a distraer, así como las actividades que solía realizar en su tiempo libre, sin embargo, nada se comparaba con estar separado de su pareja.

Algunas veces no dormía con el solo pensamiento de que a Jungkook le pasara algo. Pensó que ya tenía bajo control el sentimiento de angustia y también el miedo. Sobre todo ese, el cual había adquirido desde el incidente en su manada, que luego empeoró con lo de los mellizos. Algunas noches se despertaba angustiado e iba a revisar que los cachorros estuvieran en su cama, incluso si dormían con él, no podía evitarlo, y los contemplaba hasta que su omega y él estuvieran un poco más tranquilos.

Por eso no era de extrañar que ahora cargara unas inmensas ojeras en su rostro. En el día terminaba cansado y esperaba dormir en la noche aunque a veces no fuera posible, o por lo menos no del todo.

Se encontraba sentado en el sofá, mientras veía a los cachorros jugar con sus peluches. Extrañamente el día estaba más tranquilo de lo usual y le agradaba. Justamente hoy era uno de esos pocos días en los cuales podía relajarse un poco.

Sonrió en cuanto vio como Elian hacía soniditos mientras movía su peluche. Ainara por otro lado, lo veía fijamente como si hubiera algo realmente interesante en mirar su cara.

-¿Que pasa princesa?- se acercó con una sonrisa a su hija. Esta amaba cuando su papi omega la sostenía en brazos y le daba besitos en los cachetes, pues gritaba de emoción y en consecuencia daba manotazos que terminaban en el rostro del mayor.

A pesar de que algunos golpes le dolieron, no dejó de reír con la niña. Estaba completamente enamorado de esos niños. Si antes pensó que sería imposible encontrar el amor, el tener una familia lo veía como una fantasía. Tal parece que en la vida nada es imposible.

Agarró el peluche de tigre y lo acercó a la niña mientras tomaba asiento en medio de la sala. Ella lo agarró entre sus gorditos brazos y lo apretó contra su pecho con una gran sonrisa en el rostro.

Elian no tardó en llegar a su regazo y poner su peluche prácticamente en su rostro para obtener un poco de atención. El rubio sonrió con ternura y agarró al niño y por si acaso, también a su niña y los sentó en sus piernas para no tener quejas después.

-Ustedes son unos consentidos que buscan el cariño de papá- dijo mientras repartía besos en ambos cachetes-. Aprovecharé que son dos enanos para darles amor, estoy seguro que cuando crezcan no querrán que les de besitos.

Ambos bebés aplaudieron y rieron mientras el mayor también lo hacía.

-Iré a preparar algunos aperitivos para los tres, así que por lo que más quieran- dijo el rubio, viendo lo más serio posible a los infantes-. No quiero desorden, a menos que quieran pasar el resto de la tarde en la zona de castigos, sin juguetes, sin comida y sobre todo, sin papi para que les de amor ¿entendido?- esperaba que por lo menos esta vez si le hicieran caso.

Con mucho cuidado los dejó a ambos en la sala y se fue dando un vistazo cada nada a la sala. No se confiaba para nada, menos cuando extrañamente ambos habían estado muy calmados desde que inició el día. De hecho, todo el día había estado extraño para él. Primero Seokjin rechazando su oferta de ir a dar un paseo, luego su hermano disculpándose por tener programado turno en el local donde los tres o bueno, donde futuramente los tres trabajarían porque por el momento solo eran Jin y Jimin y finalmente, su clase de alfarería fue cancelada; justo cuando tenía tiempo y los mocosos estaban tranquilos, es que la vida por ratos lo odiaba.

🍃Solitario 🍃 OMEGAVERSE [KOOKV]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz