Cap. 5 Un tinieblo para Sofía

1.1K 137 99
                                    

Pov. Beatríz Pinzón
Varios días después…

—¿Y como a qué hora llegaría el vuelo a Bogotá?—pregunté Armando por teléfono, se encontraba en Medellín cerrando uno de los negocios de la franquicias y se había ido desde el lunes.

—Se supone que a las cinco salía, pero por la lluvia retrasaron el vuelo. De verdad espero poder irme hoy entrada la noche ya a Bogotá, mi amor—respondió Armando decaído—la extraño mucho, quería verla hoy así sea un momentico en su casa.

Tan lindo él…

—Ay doctor, no se preocupe igual hoy es viernes y si por fin llega, nos podemos ver mañana si gusta—dije sintiéndome como una colegiala con su primer noviecito, que realmente no está muy lejos de ser cierto.

—¿Que le parece si mañana vamos a sitio muy lindo que conozco?, solos usted y yo nada más—propuso Armando con picardía.

¿Me irá llevar a su departamento?

—¿Y ese sitio cuál es?—pregunte nerviosa mientras me mordía el labio.

—Un lugar abierto llegando a las afueras de Bogotá, se que le encantara—respondió Armando animado.

—Acepto su invitación doctor—respondí sonrojada por mis pensamientos.

—Es una cita entonces mi doctora Pinzón, Bueno la dejo para que termine sus cosas, la amo mucho Betty—dijo Armando de forma tierna, sonreí como tonta.

—Yo lo amo más doctor, que tenga un buen viaje de regreso—dije antes de colgar, suspiré encantada mientras retomaba la firma de nomina de los empleados, ya terminando entro a la oficina Aura María,Sandra,Bertha y Mariana.

—¿Sucede algo muchachas?—pregunte extrañada de verlas tan calladas, se acercaron con cautela a mi escritorio.

—Venimos rapidito mientras Inesita distrae a Sofía—dijo Bertha de forma cómplice—queríamos saber si su Merced nos acompaña hoy a una salida de chicas.

—¿Y que tiene que ver qué Sofía este distraída con Inesita afuera?—pregunte confundida, las muchachas hicieron señas para que bajara la voz—¿Qué pasa?

—Estamos buscándole un tinieblo a Sofía, Uy Betty, tuvo que ver cómo se puso hace rato cuando vio la idiota del cheque—respondió Sandra con pena—ese hombre al ver cambiada a Sofía se le fue la baba de una y Sofía ahí toda rozagante por los piropos del infeliz ese.

—Por eso aprovechando que Sofía está triple mamita, decidimos en ayudarla a buscar un buen partido por ahí—dijo Aura María emocionada—¿Se nos use a la misión Betty?

Mire la hora en mi reloj y eran ya casi las siete.

—Bueno, todo sea por qué Sofía no caiga otra vez en semejantes garras—dije sonriendo, las muchachas pegaron brincos de alegría—eso si…¿A dónde vamos? Tengo que avisar en mi casa que llegaré un poco tarde.

—Nos vamos al Abrevadero, es una discoteca que está al esté—dijo Aura María contenta—ahí siempre llegan unos sementales de hombres que ufffff…

—Bueno, la esperamos afuera para irnos Betty—dijo Bertha antes de abrir la puerta de presidencia y salir.

—Nosotras nos vamos por aquí, para que no se vea sospechoso, permiso—dijo Sandra abriendo la puerta de la sala de juntas con Aura María.

No había que negar que a pesar de lo indiscretas que son en ciertas cosas, en la gran mayor parte de los casos sus actos estaban llenos de buenas intenciones.

Se Dice de Mí...Where stories live. Discover now