•Llamado Harry Styles•

67 6 0
                                        

Presente

B E T H A N Y

Corrí hacia la mesa número 4 de la cafetería, allí se encontraba una pareja mayor bastante tierna.

-Buenas noches y bienvenidos, ¿En que puedo servirles?- Les sonreí mientras sacaba la pequeña libreta y el bolígrafo que tenia en uno de los bolsillos de mi delantal.

-Buenas noches para usted también señorita, no sabemos mucho de cafés así que pensábamos que usted nos podría aconsejar alguno.. Vera, la señora aquí presente a estado muy cansada últimamente y ya sabe lo que dicen, ¡Nada más bueno para el cansancio que un café bien cargado!- El señor de unos 60 y pico de años me dijo gracioso y me fue inevitable reír enternecida mientras su, al parecer esposa, lo miraba intentando demostrar un falso enojo.

-Esta bien.. Creo que les encantará probar el café mocha caliente, es uno de mis favoritos y además...- Puse una de mis manos a un costado de mi boca para susurrarles algo. -Uno de los mas económicos- Ambos señores rieron divertidos y aceptaron mi propuesta. Caminé hacia la barra y allí me encontré con Danna, una de mis compañeras de trabajo y con la que más tiempo pasaba, ella era la que preparaba los cafés y postres junto con otro chico.

-Hey! Es lindo verte Beth pero no en estas circunstancias- Me dijo riendo haciendo referencia a la cantidad de personas que estaban en la cafetería, mientras me entregaba tres postres diferentes y yo los ponía en una bandeja. -Estos son para la mesa 9-

-Bien, quieren dos cafés mocha calientes en la mesa 4- Le sonreí y esta me guiño un ojo para después voltearse hacia la maquina de café.

Después de entregar esos postres y darles los cafés a los ancianos, me dirigí al cuarto de empleados ya que había finalizado mi turno. Guardé el delantal que tenía el nombre de la cafetería en mi mochila y solté mi cabello. Cuando me dispuse a salir de el negocio, Danna me detuvo y me entregó una servilleta.

-Los de la mesa 4 te han dejado una nota, te veo el Lunes Beth-

Salí de la cafetería y note como las luces de la calle alumbraban la noche de hoy. Comencé a caminar hacia mi casa la cual no quedaba nada lejos mientras abría la servilleta que tenia en mis manos:

  "Muchas gracias por su ayuda el día de hoy. Espero que su noche sea tan buena como la crema de estos cafés.
Att: Sr. y Sra. Gale"

Sonreí divertida por las ideas extraordinarias que esa pareja tenía, aunque fueran ya bastante mayores disfrutaban de la vida como si fueran todavía jóvenes. 

Al llegar a casa fui recibida por mi Schnauzer, Mickey, quien saltaba apoyando sus patas delanteras en mis piernas. ¡Maldición! No lo había llevado de paseo esta noche debido a mi horario de trabajo. Mickey ladeó su cabeza tiernamente como si leyera mis pensamientos y como hacia todos los días, fue a traerme el periódico que llegaba en las mañanas. Lo tomé en mis manos y comencé a caminar hacia la sala para dejar mi mochila en alguna parte y sentarme a leer.

Clima, bla bla bla, deportes, bla bla bla, chismes, chismes, ¡Wow Lady Gaga se casará genial! Llegué a la columna de "Empleos" y mire a Mickey quien se encontraba acostado en el suelo. Comencé a buscar con mi dedo la palabra animales y al hacerlo di con lo que en realidad buscaba. Paseador de perros.

Dos días después, Lunes.

Escuché como el timbre sonaba. ¡Por fin! El chico que solicitaba el trabajo de paseador de perros había dicho que vendría por Mickey a las seis en punto de la tarde pero ahora eran las seis y media cosa que me enfurecía ya que ahora yo llegaría muy tarde a la cafetería.

Tomé la correa azul marina de Mickey y me dirigí a la puerta de la casa con mi mochila en mi otra mano.

-¡Joder hasta que te dignas a aparecer!- Dije enojada mientras salía sin mirar en ningún momento a quien estaba frente a mi.

-Ay calmate, solo se me hizo un poco tarde- Escuché que se burlaba, haciéndome enfurecer aun más. Voltee a verlo con mi ceño fruncido, era un chico rubio con ojos azules. Mas o menos de mi edad o un poco mayor.

-Pues ese "poco" me afecta muchísimo, donde mi jefe se llegue a enterar de que llego tarde al trabajo me corre así que ten a Mickey, no muerde ni nada por el estilo- Le entregué la correa y unas cuantas bolsas para recoger sus heces. El rubio miró las bolsas con una ceja levantada.

-Bolsas rosas para un...- El chico miro detenidamente a Mickey. -¿Macho? Lo vas a volver marica-

-Por supuesto que no y si prefieres comprarle otras sientete libre de hacer eso- Rodee mis ojos para después acariciar la cabeza de mi perro y comenzar a correr hacia la cafetería.

¿Ese chico que se creía? ¿Y que creía? ¿Que yo me rasco la panza todo el día o que? Ni siquiera le pregunte su nombre. ¿Ugh pero para que lo necesitaría? Para mi se quedaría como "El chico que pasea a Mickey". El cual es un poco lindo.. Bueno, tal vez muy lindo pero hasta ahí, no debo de pensar así de un chico teniendo novio, al cual no veo desde hace ya varios días. Tal vez deba llamarlo cuando este en la cafetería. A mi loco y extraño novio.

Llamado Harry Styles.

Enjoy :)

BULLETPROOF •NH• •HS•Where stories live. Discover now