Capítulo 1 - El Inicio

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No solía ser sociable, siempre he sido un oso muy callado. Me llamo Riz, El Oso Pardo, tenía 17 años y medía más de 2.00 metros de alto cuando empecé estudiar en la Academia Cherryton. Mis padres siempre estuvieron de acuerdo con que yo estudiara en dicha escuela, y se veía un lugar muy abierto, parecía que los carnívoros y herbívoros de aquel lugar convivían en armonía, ingresé a la institución, debía acudir a donde me asignarían mi cuarto, me integraron en la habitación 308, ya que por mi especie debía estar con un grupo de úrsidos. Ahí conocí a otros dos osos, Yoko y Kano. Yoko era mucho más marrón que yo, tenía dos manchas cafés en sus ojos y su edad era igual a la mía. En cuanto Kano, pues él era diferente ya que era un oso Polar, sin embargo, tenía nuestra edad y misma estatura.

- Hola, mucho gusto, soy Riz. – Me presenté primero, no es raro de mí.

- Un gusto conocerte Riz, soy Kano

- Igualmente para los dos, me llamo Yoko

- Bueno, parece que seremos compañeros de cuarto ¡Qué Bien! – Exclamó Kano

Noté que ellos dos tenían personalidades diferentes, Kano demostraba ser más confiado al momento de hablar y Yoko parecía más serio... confiaba en que nos llevaríamos bien y como éramos osos no tendríamos prejuicios de hablar con timidez.

Al siguiente día a las 8:00 a.m. tenía clase de Lenguaje Marino, sin embargo, esa noche sentí que no podía dormir bien, supuse que fueron los efectos secundarios de las pastillas para que no crecieran mis músculos. Así es, los osos que miden más de 2,00 m deben tomar píldoras para que su masa muscular no se atrofie y el único remedio que logra calmar el impacto es la miel, por eso me había sumido en el insomnio y solía estar muy cansado. En fin, juraba que mis compañeros también estaban en aquella aula, pero al parecer cada uno tenía horas de clase distintas, deseaba verlos en el almuerzo, se veían amigables después de todo.

Pasó una hora y estaba a punto de dormirme, aunque al menos presté la atención necesaria para tomar mis apuntes.

- Y bien alumnos, esto fue todo por hoy – anunció el profesor – Se me olvidaba, ya que son estudiantes de primer año en la academia, deben inscribirse a un club/extraescolar, en el pasillo principal encontrarán más información. Tengan buen día.

Ya habían pasado 2 horas y las últimas clases fueron interesantes, me dirigí directamente al lugar mencionado por el profesor para inscribirme en algún club. Me di cuenta de que ya estaban llenos algunos clubs como el de Deporte, Música, Periodismo, entre otros, así que opté por el de Teatro. No me gustaba actuar, pero ser parte del equipo de sonido o tramoyista era tolerable.

Ordené frijol, arroz y tomates en el almuerzo, mientras buscaba a mis amigos, casi todo el restaurante estaba lleno, por suerte los encontré y estaban solos.

- ¡Hola, Riz!, ¿Cómo te fue en tu primer día! – Preguntó Kano.

- Estuvo bien, la verdad es que me ha parecido agradable. ¿Y cómo estuvieron sus clases?

- Completamente normales, por cierto ¿ya se inscribieron a un extraescolar? – inquirió Kano.

- Yo me inscribí al de Deporte – replicó Yoko.

- Y yo al de Música. – respondió Kano ¿Y tú al cual te inscribiste, Riz?

- Bueno, escogí el club de Teatro, me pareció interesante. – respondí.

- ¿Te gusta actuar? – Me cuestionaron

Los miré a los dos, con gesto de confusión y contesté – en realidad no, pero con ser tramoyista o siendo apoyo con el equipo de sonido me conformo.

- ¿Y qué les gusta hacer en sus tiempos libres? – pregunté adicionalmente.

- Bueno, por lo general suelo hacer mucho ejercicio y leo de vez en cuando unos cuantos mangas – argumentó Yoko

- En mi caso, me gusta tocar la guitarra y escuchar cualquier tipo de música. – la forma que respondió Kano exhibía su alegría al estar con nosotros.

- ¿Y tú Riz?

- Me gusta cocinar, desde que era un cachorro me ha gustado mucho la gastronomía. Tal vez podría hacerles algunos aperitivos de vez cuando.

- ¡Suena excelente! – exclamó Kano felizmente

- Claro, por su puesto, que buen gesto de tu parte, gracias...

Ese día estuvo normal, sin embargo, me sentía muy agotado. Ya era de noche y debía tomar las píldoras antes de dormir, esperaba descansar tranquilamente. Fui al baño y me tomó por sorpresa que mis compañeros estuvieran ahí.

- ¿Así que ustedes también toman las pastillas, ¿eh? – los cuestioné

- Si, ya sabes, el gobierno nos las obliga tomárnoslas – Yoko no parecía satisfecho con esto, supongo que él también quería dejar de consumirlas, al igual que Kano.

- Es por nuestro bien, pero no nos desanimemos por esto, los tres somos osos y hay que apoyarnos. – me sorprendió esa forma de pensar de Kano, era muy optimista.

Esta es la Verdad - (Beastars - Fanfic)Where stories live. Discover now