CAPITULO SEIS

1K 62 0
                                    

CAPITULO EDITADO

León

Un mes después...

Ha pasado un mes desde que estoy en la casa de esa mujer, no puedo salir, no puedo arriesgarme tanto. Hernán me comenta todo lo que pasa o trata de decírmelo, siente que hay personas vigilándolo así que es discreto.

No es fácil, esconderse de mi padre por un largo tiempo.

Debo admitir no tengo la mínima idea de que hacer, ni como actuar con respecto a Ana. Tengo todas las posibilidades de salir de acá, aunque quiero irme de este lugar, tengo que estar con los dos hermanos ya que les debo la vida. Tengo que llevarme a Hernán y Ana conmigo, solo espero que esta mujer acepte porque a veces es imposible hablarle

Escucho que la puerta principal se abre, levanto mi vista para saber de quién se trata. Un hombre desconocido está frente mío, trago saliva muy nervioso.

¿Qué se supone que haré ahora?

— Hola — me saluda sin más y se dirige hasta la cocina como si nada, cada movimiento de él comienzo a inspeccionar.

¿Qué está pasando? ¿Quién es el? Me parece conocido.

— ¿Quién es el? — me pregunto. El hombre me mira de arriba abajo y se tapa la boca de asombro, se aproxima hasta mí.

— ¿Quién eres? — cuestiona con un tono enojado mientras se acerca hasta mí, trago saliva porque no sé qué decir.

— ¿Te comió la lengua el ratón o que te pico? — interroga

. Escuchamos que alguien abre la puerta y miramos los dos, Ana esta frente de nosotros.

¿Qué haces aquí? No te dije que me avisaras cuando ibas a venir aquí- pregunta al sujeto desconocido quien me mira mal.

— ¿Quién es el? — repite la pregunta mirándome de arriba abajo, ruedo los ojos.

— Yo pregunté primero — contesta enojada, el hombre le mira mal.

— León él es Edric mi mejor amigo, Edric él es León un conocido — nos presenta con mucha rapidez.

— ¿Dejas que un desconocido entre aquí? Eres increíble Ana — regaña el hombre a la mujer quien se va tranquilamente sin hacer caso al hombre.

— quédate tranquilo, Edric. El necesita ayuda y más, estará aquí por un tiempo, deja de estar regañándome por eso — expresa con tranquilidad.

— ¿De qué mierda estás...? — nos quedamos en silencio al escuchar disparos frente a nuestra casa, me pongo en alerta, maldigo, saco mi arma y escucha un grito de mujer.

Carajo. Ella sabe mi secreto, pero es mejor que sepa ahora. Ahora es mi momento de protegerla de los disparos.

— ¿Por qué tienes un arma de fuego, León? ¿Qué está pasando? — interroga con desesperación Ana, ignoro esa pregunta que contestaré mas adelante.

— Escóndanse en la habitación de tu hermano ahora — ordeno sin mirar a las dos personas que están frente mío. Oigo que ellos hacen caso a mi orden y se van a la pieza, cierran la puerta con llave.

Minutos más tarde...

Los disparos se siguen escuchando fuera de la casa, alguien patea la puerta, observo a dos sujetos encapuchados y armados.

— ¿León Romanov? — preguntan los dos al mismo tiempo.

— Con el mismo ¿Que quieren? — cuestiono con un tono frío.

— El jefe quiere tu cabeza, vendrás con nosotros — suelta sin más. No hago caso a los dos hombres, no tengo la confianza de ir ellos dos no podrán conmigo total mi padre fue quien me entrenó.

— Oblíguenme — hablo entre dientes.

Los disparos comienzan por todo el lugar. No quería que la enfermera se enterará así de mi identidad, pero no había ninguna otra opción, escucho que la puerta donde está ella se abre, volteo a ver a su amigo sacar una pistola empieza a disparar. Observo que el hermano de Ana está atrás de los dos encapuchados, apunta a los dos hombres.

— Dejen de disparar ahora mismo o les vuelo la cabeza. En mi casa nadie entra ¿Acaso no me conocen? — dice con un tono frío que hasta a mí me hace temblar, los hombres se quedan quietos y bajan sus armas.

— Ese hombre no irá a ningún lado con ustedes ahora salgan de aquí antes que les vuele las cabezas a los dos — amenaza enojado y los dos se largan despavoridos.

¿Qué está pasando acá? ¿El hermano y mejor amigo de Ana son también de la mafia? Hernán me dijo que él trabaja para mi padre, pero no me dijo en que posición estaba.

— ¿Dónde está mi hermana? — pregunta serio el niño.

— Está en la habitación — contesta tranquilo Edric.

Horas más tarde...

Nadie se encuentra en la sala, solo en la habitación con Ana. Edric, el amigo de Ana, sale de la habitación.

— Nos vamos de aquí, ya no podemos estar aquí — informa mientras se va a las habitaciones para empacar sus cosas. Persigo a él hasta la pieza donde están los hermanos.

— ¿Qué pasa acá? — cuestiono confundido, ellos me ignoran completamente. Los dos se miran y Edric asiente con la cabeza

— Hace unos días, había un cartel de recompensa. Te están buscando. Sabía las consecuencias si te quedabas, pero no, hermana por alguna razón está muy apegada a ti así que no te denuncié ahora todos saben que estás conmigo. Ahora el jefe también quiere mi cabeza, es mejor largarnos de una buena vez de aquí — cuenta Hernán con mucha rapidez, Ana sale de la habitación corre hasta su hermano y escanea para saber si está bien igual hace conmigo y su mejor amigo.

— ¿Ustedes sabían quién era desde un principio? — pregunto asombrado.

— Yo no pero mi hermano me advirtió, no quise hacerle caso. Mi deber como enfermera es atender a las personas no importa su condición no puedo echar de la nada a un hombre herido y sin hogar — dice tranquila y con una sonrisa.

¿Por qué está tan tranquila?

— Ana. Debemos empacar, saldremos a la madrugada — informa su hermano y ella asiente con una mueca, se da la vuelta para ir a su habitación.

Esta familia cada vez me impresiona más, pero siento que algo me están ocultando todos ellos y lo averiguaré muy pronto de eso estoy seguro.

— ¿Dónde iremos? — pregunto, pero nadie me contesta, bufo y ruedo los ojos.

— Nunca me dicen nada a mí tampoco, ya te acostumbrarás con ellos dos — dice el mejor amigo encogiendo su hombro y planeando el mío.

¿Dónde tienen planeado ir estos dos?

El Heredero Perdido (# 2 PM)Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ