Capitulo 4

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Ayuda...

Los pasos de dos jóvenes era lo único que resonaba por el pasillo desierto; a juzgar por la hora, todos los alumnos o al menos la gran mayoría deberían estar en el comedor. Pero claro, «el dúo de problemáticos», aun tenían que hacerse una revisión en la enfermería y luego, directo a la oficina de su profesor.

Dudaban que les alcanzara el tiempo para almorzar.

«Aunque no creo que sea capaz de comer nada», pensó Shōto; mientras observaba la espalda de su compañero alejarse a pasos agigantados. No intento cruzar palabra con el rubio después de la interrupción de su profesor, las palabras que le dedico su compañero durante la discusión lo habían trastocado.

«No dejaré que me sigas jodiendo la vida».

Esa sola frase lo hizo abrir los ojos, y entender un poco más la situación, ¿Quién se creía para quejarse de su suerte?, era obvio que quien la estaba pasando peor allí era Bakugō ¡Lo había marcado en contra de su voluntad! Se aprovecho de él en su estado más vulnerable. Era obvio que Bakugō no lo querría ver ni en pintura.

Shōto se sentía como un desconsiderado.

Solo estaba tratando de expiar su culpa al acercarse al rubio sin tomar en consideración sus sentimientos. Además el hecho de sugerir hablar con su profesor era otra prueba de ello: la U.A. prohibía las relaciones alfa-omega en la institución, pero Shōto solo lo dijo pensando en que él recibiría el castigo que se merecía, mas no tomo en cuenta lo que esto podría significar para Bakugō.

Enserio era un idiota.

«Debo ser un héroe de él que todos puedan depender», esas fueron sus palabras unas horas antes de... lo ocurrido. Y recordarlo solo lo hacía sentir un hipócrita: No fue capaz de mantener sus palabras ni después de unas horas. ¿Cómo podría llamarse un héroe luego de lo que hizo?

Ni siquiera su padre sería capaz de hacer lo que él hizo.

Era peor que un...

-No quiero que entres, -la voz de Bakugō lo hizo salir un poco de su mente, dándose cuenta que estaban a unos pasos de la puerta de la enfermería, y sin esperar una respuesta suya, el rubio ingreso al lugar dejándolo solo en el pasillo.

«Soy el villano que le destruyo la vida a un amigo».

...

-¿Uraraka-san, estás segura de esto? -pregunto mirando dudosa la puerta frente a ella.

-Claro que si, Yaomomo, recuerden que esto lo hacemos por el bien de Todoroki-kun -afirmo Ochaco, viendo al resto de sus compañeros.

Asui, Hagakure, Kaminari, Kirishima, Mina y Iida aun se mostraban inseguros por lo que podría pasar si los descubren intentando violar la privacidad de uno de sus compañeros, pero su preocupación por el bicolor era mayor.

-Listo -aviso Yaoyorozu con una llave maestra en sus manos.

-¡Bien! -Ochaco tomo la llave y la inserto en la cerradura.

«Lo siento, Todoroki-kun; lo hacemos por tu bien». Pensó mientras empujaba la puerta dejando entrar a sus compañeros tras de sí.

Después de escuchar lo ocurrido en el entrenamiento por Iida, y la conversación que alcanzo a oír con Hagakure en la enfermería, no podía quedarse de brazos cruzados. No le gustaba ver a sus amigos en problemas, aun recuerda el estado de Tsuyu luego de lo ocurrido tras el secuestro de Bakugō: ella estaba sufriendo y sobrellevando su dolor sola, sabía que Todoroki era incluso más reservado que Tsuyu, por lo que le sería mucho más difícil aceptar ayuda.

Debilidad ante el instinto - TodobakuWhere stories live. Discover now