También soy tu madre (Little Witch Academia)

En camino a Naranca

Mansión Cavendish

Nos encontramos el la habitación de la joven Catherine, quien se encontraba platicando con su mejor amiga sobre lo que estaba a punto de hacer por medio de una esfera mágica.

- ¡Me alegra saber que si iras en búsqueda de tu madre, Catherine!

- Lastimosamente, no puedo decir lo mismo Clementhyne... Mira que perder mi tiempo así...

- Catherine... ¿En verdad desprecias así a tu madre...? Es decir, al principio creía que en verdad era alguien mala por cómo te expresabas de ella, pero una vez que la conosi... Me di cuenta de que en verdad es una madre genial a diferencia de mis madres. Mi madre Amanda trabaja demasiado desde que tengo memoria y tan sólo puedo verla algunas semanas al año debido a sus constantes viajes a Estados Unidos, mientras que, mi madre Hannah a sido muy estricta conmigo desde que era muy pequeña, ella siempre puso en primer lugar los estudios de brujería y comportamiento social antes que un abrazo o un simple “Te quiero Clementhyne”. ¿Es enserio que la desprecias tanto sólo por el hecho de que no viene de una casta antigua de bruja?

(Catherine sólo guardo silencio por un minuto)

- Tu no lo entenderías Clementhyne... No puedes entenderlo porque tu no eres el resultado de algo que no debió pasar... Tu educación sin duda es excepcional y tu sólo... Y tu sólo te quejas de eso cómo si no hubiese un mañana... Me hubiera gustado tener la educación que ahora posees.

Tras escuchar esto, la mirada de felicidad de Clamenthyne cambio a una sería y molesta.

- En verdad no tienes ni idea de lo que dices Catherine Cavendish... Y si en verdad piensas de ese modo, temo que nuestra amistad tendrá que llegar a su fin.

Catherine sólo río sarcásticamente.

- Por mi parte, esta amistad acabó hace mucho tiempo. Sólo te decia que eras especial para mi para abusar de tu confianza una vez fueras tan apegada a mi cómo lo fueron la tía Barbara y tu madre Hannah con mi madre en su momento, pero ya no serás necesaria... Adiós Clemen...

- Te dices estar orgullosa por portar el apellido Cavendish, pero ¿Tu apellido esta orgulloso de ser portado por ti?

Sin esperar alguna respuesta, Clementhyne finalizó la platica por la bola mágica, dejando a Catherine con algunas palabras en la punta de su lengua.

- Esa idiota... ¿Quien diablos se creé para ablarme así a mi? ¡¡¡A MI!!! Bueno, no importa... Que le den...

Sin darle mas importancia a lo acontecido anteriormente, Catherine se levantó de su cama para colocar en su lugar aquella bola de cristal y salir de su habitación para dirigirse a la de su madre donde al llegar, sólo escucho lo mismo, a su querida madre llorar.

- (Toca la puerta) ¿Ma... Madre...?

(No hubo respuesta)

- Ma... Madre, (Suspira pesadamente) ¡Me dirigiré a Naranca para traer a Atsuko de vuelta!

En ese mismo momento, los llantos de Diana cesaron sólo para que rechinidos de su cama comenzaran a escucharse  junto al sonido de botellas de vidrio moviéndose, probablemente de alcohol. Así, un par de momentos después, la puerta de la habitación de su madre se abrió, dejándola ver en un estado lamentable. Su cabello rubio verdoso se encontraba sin brillo alguno, enredado y quebradizo, sus ojos azules estaban rojos e hinchados mientras que  tenia ojeras realmente marcadas, probablemente debido a la falta de descanso. Su piel que siempre mantuvo un color blanco ahora estaba aún más blanco, pareciendo casi de porcelana mientras que, su siempre aroma a lilas ahora había sido sustituido por un aroma poco o nada grato. El aroma del alcohol.