Math [Ziam]

[ Finale pt. 2 ]

— Mhm, ya debo... —en ese momento su boca es invadida por los suaves y delgados labios del castaño.

— Buena suerte —susurra Payne sobre sus labios, guiñándole un ojo.

Zayn muerde levemente su labio y asiente varias veces con la cabeza antes de voltearse y entrar al aula.

[🧡]

Liam estaba esperando afuera del aula, con los manos metidas en los bolsillos de su pantalón, checando levemente su uniforme para cerciorarse de que estuviera impecable. No quería verse mal para Zayn, ni mucho menos hoy.

Pues sería un día especial si todo salía de acuerdo a su plan.

La alarma de la institución sonó fuertemente y sólo fueron cuestión de segundos para que los estudiantes comenzasen a salir del aula. Entre ellos estaba Zayn quién se acercó a Liam con una pequeña mueca en su rostro.

— ¿Qué pasó? —preguntó preocupado el castaño cuando estuvo cerca suyo.

— Nada malo, solo es que... Lo sentí tan fácil que me dió miedo... Es preocupante, nunca sentí un examen tan sencillo... ¿Y si hice todo mal?

Liam rió y le abrazó por el hombro.

— Ay, Zayn. Lo más probable es que te haya ido bien, si así lo sentiste. ¿Y que tal le fue a Harry?

Zayn hizo otra mueca.

— No lo sé, no ha terminado.

Liam levantó las cejas y miró de reojo al aula, observando como Harry parecía tener un debate mental desde su posición en el pupitre.

— ¡Harry, fighting! —le gritó desde lejos con su sonrisa.

El rizado sonrió levemente e hizo un pequeño puño al aire. Segundos después, el tutor se asomó a la puerta y regañó a Liam por hacer tanto ruido, este al instante se disculpó haciendo una reverencia.

— Ni modo... —suspiró hacia Zayn— ¿Qué tal si vamos a un lugar? —le preguntó indirectamente.

El pelinegro le miró con sospecha.

— ¿A donde sería?

— Ahh, no te lo diré. Sólo es cuestión de que confíes y me sigas... —sonrió pícaro.

Zayn rió.

— ¿Debería de temer?

— Talvéz... —murmuró Liam comenzando a caminar.

Malik siseó y le siguió, ambos caminando por los pasillo uno al lado del otro, muy cerca. Sin embargo, era en cierta parte incómodo, había una barrera. La cuál Liam estaba dispuesto a romper y reclamar. Miró hacia abajo, sus manos estaban muy cerca de las de Zayn, y sintiendo su corazón latir ansioso, comenzó a entrelazar sus largos dedos con los pequeños del pelinegro, quien al instante se tensó y le miró sorprendido con un claro rubor en sus mejillas.

— Parte del trato era que anduvieras conmigo en los pasillos, ¿recuerdas? —dijo Liam con una sonrisa socorrona.

Zayn sonrió y apartó la mirada con sus labios presionados intentando no soltar algún chillido de felicidad o no sonreír como un estúpido.

— Mhm, no había nada relacionado con contacto físico... —recalcó vacilante.

— ¿Ah no? —levantó sus cejas.

— No...

Liam formó con sus labios una sonrisa ladina.

— Pues, renuevo el trato. ¡O si no manipularé tú examen para que repruebes!