HALLOWEEN

capítulo XII

Peter estaba en chock, su cara no hacía ningún gesto, solo se podía ver como sus ojos se hacían un charco mientras una lagrima corre por su mejilla, camina hacia su madre y la abraza fuerte.

Ante aquel acontecimiento se le destrozaba el corazón a Ema poniéndose en el lugar de su hijo o de la madre de Jack.

Esa noche nadie pudo comer en la casa y todos después de comida fueron a la cama. Peter sueña una vez más que estaba encerrado en aquella casa grande corriendo por todos los pasillos en la oscuridad de la noche, sentía como Jack gritaba "ayuda" y el sentimiento de culpa y el remordimiento de no poder hacer nada era espantoso, hasta que vuelve a llegar a aquel pasillo misterioso.

Al instante reconoció el lugar y se dirigió a la puerta en la que en sus sueños anteriores había visto a la niña. Al adentrarse los gritos de Jack sesaron y esta vez la puerta estaba trancada y la intentaba abrir a patadas, empujones pero la puerta no cedía; de repente, sin mas ni menos se abrió sola y se encontró en el mismo escenario. La chica continuaba tarareando su canción a la luz de la luna, Peter estaba un poco asustado aunque no era la primera vez que le sucedía, tenía que reconocer que esa canción le ponía los pelos de puntas.

Comenzó a caminar hacia la niña en silencio, cada paso que daba lo martirizaba más y más. A medida que avanzaba el temor iba siendo mayor y al ver que la chica lo ignoraba lo hacía sentirse un fantasma; cuando le fue a colocar la mano en su hombro para quitarse la duda sintió un grito "!Cuidado Frank! cuidado!"; era una mujer muy bien parecida, vestida muy elegante, de una estatura estándar; por su desesperación y su cara de susto parecía estar aterrada.

Peter se puso muy nervioso y al mirar a la chica que se levantó agarrando una tijera quedo perplejo, solo podía ver unos ojos rojos en su rostro.

La chica se levantó y empujando a Peter hacia un lado salió por la puerta del cuarto, se podía sentir a la mujer gritando por su vida . Peter corrió hacia el pasillo, al salir del cuarto se dio cuenta que ya no había oscuridad y todo era tan limpio y tan elegante; las paredes estaban pintadas de amarillo, un amarillo tan fino y elegante como un girasol , el suelo brillaba de su limpiezas similar a un cristal en el mar al darle el sol. Peter no comprendía que pasaba, caminaba a prisa hacia unas escaleras que ve al final del amplio pasillo y al llegar se da cuenta que llevaban a una sala en el primer piso. Ahí estaba la chica forzageando con aquella mujer que al parecer era la madre quien sin querer la tiró contra una vidriera y se golpeó la cabeza. Dándole una patada a la tijera se ardilla a socorrer a la chica.

-Mujer: ¡Rosa, Rosa!. ¿Estás bien?respóndeme por favor ¿por qué me estas obligando a hacer cosas que no quiero, mataste a tu padre.

*Decía la madre mientras lloraba, pero con furia la levantó cojiéndola por los brazos y con esfuerzo la arrastró hasta una puerta al lado del sillón.

Peter escondido miraba el acontecimiento temblando bajo las escaleras y corrió hasta aquella puerta. Al abrirla se dio cuenta que era un sótano, comenzó a bajar y sintió un ruido, estaba trancado a oscuras caminando hacia abajo mientras la luz comenzó a parpadear; solo asomó su cabeza de la escalera y vio como la madre amarraba a su hija a una silla mientras lloraba e intenetaba morderla y sentándose frente a ella, de pronto, ambas miraron a Peter y se apaga la luz por completo.

Peter se despertó al instante y corrió a encender las luces chocando con todo lo que se le interponía en su camino. Al ver su cuarto y las luces encendidas le volvió el alma al cuerpo. Miró su reloj despertador y faltaban unos minutos para que sonara la alarma. Un día siniestro se avecinaba.

Espero que le sigan el hilo al libro y no paren de sorprenderse y si les gusto no dejen de darle su voto y déjeme sus comentarios y sus opiniones gratcie 😊