Fluff; Saimatsu fic (KaedexShuichi)

Capítulo cinco: Fear

La respiración de la muchacha era suave, Shuichi la sostenía del brazo dejando descansar la cabeza de la chica en su pecho. El aire caliente traspasaba la tela de su ropa haciendo contacto con su piel causando  estremecer.

Soltó un suspiro y preocupado pronunció su nombre bastantes veces. Notó como los ojos violetas comenzaban a hacerse presentes y en un acto de alivio, Saihara abrazó con fuerza a Kaede.

— ¡Estás bien! ¿Qué sucedió? — Cerró sus ojos apegándose más a su cuerpo. Si había levantado la voz, era porque aún estaba nervioso.

— ¿Saihara? — Murmuró desconcertada, intentando recordar lo que ocurrió antes — Perdona… creo que me desmayé por no haber comido hace dos días.

— ¡¿Dos días?! ¡Debes cuidarte! — Gritó alterado tomando de la cintura a la rubia para pararla junto a él.

Shuichi no quiso preguntar, no era necesario en sí. Su cerebro ya había sacado una conclusión del porqué de la situación. Kaede suele perder la noción del tiempo al tocar el piano, y juntando eso con que pronto tocará en un concierto; daba el resultado del porqué Akamatsu no se alimentó adecuadamente.

El detective, con una expresión de molestia por el descuido de su actual pareja la guió hacia fuera de la escuela. Era tarde y el paisaje se teñía de colores rojos y anaranjados. Caminaron hasta llegar a una tienda.

— En serio no tienes que comprarme nada, Saihara. Iré a mi casa y comeré. — Sonrió débil. Se notaba que no tenía energías… de seguro tampoco había dormido correctamente.

— Puedes desmayarte en el camino a casa. No voy a correr ese riesgo y que suceda algo peor. — Finalizó con un tono frío, y entró a la tienda.

(.)

Comió desesperada ambos sándwiches a la vez, se notaba su bestial hambre. Su novio acarició su cabeza con ternura, él sentía que había sido un poco agresivo con ella.

— Deberías tomar agua y comer más despacio, podrías atragantarte — Sugirió un poco más calmado, extendiendo la botella de agua.

— Tienes razón. Lo siento… realmente tenía mucha hambre.

— Me doy cuenta… 

El silencio los invadió. La rubia bajó la intensidad al comer, y Saihara leía un libro que tenía guardado en su morral marrón oscuro. 

Por más atención que quisiera dedicarle a su lectura, sus ojos siempre se dirigían a Kaede. Involuntariamente no se estaba enterando lo que sucedía en el libro, solo sabía que su novia es el ser más hermoso del mundo. 

— Me asusté ¿sabes? — Comentó llamando su atención — Verte tirada inconsciente fue horrible, realmente tenía miedo.

— Lo lamento. No quería hacerte pasar un mal rato, suele pasar… me divierto mucho practicando nuevas melodías. — Dijo suavemente, colocando su mano sobre la de Shuichi.

— Cuídate Kaede… por favor ¡Mira si sucedía en la calle! Podría pasarte algo — Tembló soltando el libro, y lanzándose sobre ella.

La sostuvo en sus brazos, Kaede al sentir la fuerza y desesperación en ese abrazo supo que sucedió algo más.

— Tuve un sueño en el que morías…me sentí impotente por no lograr salvarte. 

Eso la dejó helada sintiendo las lágrimas de su novio caer, correspondió al abrazo con más fuerza para afirmar que ahí estaba, que nada malo pasaría. 

Lo alejó unos centímetros. Ambos quedaron viéndose por unos segundos mientras Akamatsu acariciaba las mejillas del detective alejando los rastros de las lágrimas. Sonriendo con seguridad estampó sus labios con los otros.

Saihara sin palabras se dejó llevar y la tomó por la cintura. Sin duda el miedo se había ido.