Capitulo 14. Canicas De Vidrio

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Este día fue el día de suerte de Chen Xiao Mi, había capturado un jabalí después de días de llegar a casa con las manos vacías.

Muchos aldeanos lo habían visto, pero nadie se atrevió a acercarse a Chen Xiao Mi o tener una conversación con él debido a su mala reputación. Todos lo miraron con envidia.

Chen Xiao Cai y Chen Xiao Mai entraron en éxtasis al ver eso.

Chen Xiao Mi también estaba de muy buen humor, cortó al jabalí en partes, planeaba guardar los huesos para él y vender las otras partes por un buen precio.

Lu Lin cocinó un tofu salteado con ajos y una papilla de caldo de huesos para la cena.

La papilla de ñame chino estaba deliciosa y los hermanos Chen parecían disfrutarla, pero Lu Lin buscaba constantemente una dieta diversa.

Lu Lin estaba tan feliz cuando Chen Xiao Mi masacró al jabalí. Los huesos eran ricos en calcio y colágeno, pero las personas en ese tiempo y espacio no se dieron cuenta de eso y no hicieron un buen uso de los huesos.

Lu Lin guisó el caldo durante más de dos horas hasta que todos los ingredientes se pusieron dorados.

La tripa de cerdo también era un gran ingrediente, era muy cara en la sociedad moderna, pero era una pena que Chen Xiao Mi no supiera cocinar tripa de cerdo, solía tirar la tripa de cerdo como basura.

Chen Xiao Mi disfrutó de la papilla de caldo con obvio gusto, estaba tan contento de haber decidido dejar que Lu Lin se hiciera cargo de la cocina, no podía creer que esos huesos pudieran hacer tan buenos ingredientes. No pudo evitar castigarse por tirar muchos ingredientes geniales.

Lu Lin estaba muy contento de ver la forma en que los hermanos Chen disfrutaron de la cena.

Sin embargo, Chen Xiao Mi tenía una pregunta, se preguntaba cómo Lu Lin había cortado los huesos en partes pequeñas. Debe haber usado un cuchillo muy afilado.

Chen Xiao Mi estaba interesado en la caza, estaba interesado en los cuchillos, pero al final no le preguntó a Lu Lin.

"Hermano mayor, ¿vas a la ciudad?" Preguntó Chen Xiao Cai.

Chen Xiao Mi asintió con la cabeza, "Necesito vender la carne de cerdo, para que podamos tener dinero para comprar cosas".

Chen Xiao Mi planeaba ir a la ciudad hace días, pero siguió reprogramando porque el arroz, los huevos, la sal y todos los demás ingredientes seguían regenerándose ... ...

Lu Lin se alegró de escuchar eso.

"¿Vas a la ciudad en carreta de bueyes?" Lu Lin buscó en la memoria del anfitrión y descubrió que los aldeanos generalmente tomaban prestada la carreta de bueyes del jefe de la aldea cuando iban a la ciudad.

El rostro de Chen Xiao Mi se oscureció, parecía disgustado y dijo: "Voy a pie".

De repente se le ocurrió a Lu Lin que Chen Xiao Mi tendría dificultades para tomar prestada la carreta de bueyes del jefe de la aldea debido a su reputación, además, por lo general, algunas personas organizaban un tiempo y tomaban prestada la carreta de bueyes juntos.

Y ahora tenía sentido por qué Chen Xiao Mi había masacrado al jabalí, era más fácil llevar las partes en lugar de todo el jabalí.

"¿Puedo ir contigo?"

Chen Xiao Mi asintió, "Está bien, pero tú también necesitas caminar".

Lu Lin asintió, estaba interesado en ver el centro de la ciudad.

Lu Lin vaciló un poco y preguntó: "Tengo algo que quiero vender cuando estemos en la ciudad, ¿conoces a alguien que pueda estar interesado?"

"¿Qué tienes?" Chen Xiao Mi tenía curiosidad.

Lu Lin sacó una canica de vidrio de su bolsillo, los ojos de Chen Xiao Mi estaban pegados a esa pequeña cosa brillante de inmediato.

Había bastantes juguetes para niños en la tienda de conveniencia, pero muchos de ellos eran demasiado novedosos para ese tiempo y espacio.

Lu Lin había encontrado algunas canicas de vidrio en su tienda hace unos días, le encantaba jugar a las canicas de vidrio cuando era niño, pero fueron reemplazadas por juguetes de lujo con el paso del tiempo.

Lu Lin sabía que había trabajos de vidrio en ese tiempo y espacio, pero eran exóticos y, por lo general, se acumulaban como un bien escaso.

Una canica de vidrio era un pequeño objeto esférico que era colorido por dentro. La gente en los tiempos modernos no levantaría los párpados al ver uno, pero no era diferente a un tesoro en este tiempo y espacio.

"Esto es tan hermoso, ¿cómo lo conseguiste?" preguntó Chen Xiao Mi.

Lu Lin había preparado una historia de antemano, dijo que vio a dos comerciantes cuando era un niño, y esta canica se cayó de su bolsa.

Chen Xiao Mi frunció el ceño al escuchar que esto pertenecía a otra persona, pero pronto volvió en sí.

Eso sucedió hace años, seguramente nadie seguiría con este asunto.

"Buscaré un comprador para ti, pero todo depende de la suerte de cuánto puedas venderlo".

Lu Lin sonrió, "Está bien, podemos usar el dinero para comprar cosas para el invierno".

Chen Xiao Mi estaba satisfecho de escuchar esa respuesta, sí, necesitaban muchas cosas para el invierno.

Chen Xiao Mi estaba satisfecho de escuchar esa respuesta, sí, necesitaban muchas cosas para el invierno

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LA CONVENIENCIA DE LUWhere stories live. Discover now