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.𝙍𝙪𝙥𝙩𝙪𝙧𝙖 𝙖𝙢𝙤𝙧𝙤𝙨𝙖.
— 𝑇𝑒 𝑒𝑥𝑡𝑟𝑎𝑛̃𝑜 𝑦 𝑡𝑒 𝑛𝑒𝑐𝑒𝑠𝑖𝑡𝑜...
•˖* Jin
Llevaban separados 2 semanas, cosa que para Jin los días se volvían una eternidad.
La empresa le había pedido que su relación se terminara pues sentían que ya no estaban interesados en su carrera, cosa que era falso y solo querían que terminaran para que las demás empresas no hablaran mal de ustedes.
Te encontrabas en Londres, pues estabas dando la mejor gira de tu vida, en el escenario te sentías poderosa y la tristeza se iba pero una vez que bajaba del escenario tu depresión volvía
Jin sentía lo mismo y peor, pues BTS se encontraban en un descanso para después volver con más fuerzas, tenía ansiedad constantemente pues se mantenía ocupado y a tu lado, pero ya no era así.
—Mañana tenemos descanso igual, ¿no?
—Te dije que tenemos 5 semanas más de descanso, ¿porqué llevas preguntándome lo mismo desde hace 2 horas?
—Me voy a Londres
Yoongi hizo una expresión de admiración, sabía como se sentía su mayor y había estado ahí para él cuando se sentía mal
—Perfecto, me saludas a ____ y dile que este comiendo bien y abrigate que hace frío.
El mayor sonrió ante el apoyo de su amigo, sin pensarlo más empacó y pidió que lo llevaran en un jet privado, solo Jin se atrevía a cruzar todo el mundo por ti.
•˖* •˖* •˖*
—¿Señorita, esta bien?— te preguntó un miembro del staff mientras sostenía tu brazo con fuerza para impedir que te resbales
—Necesito aire, necesito estar sola
—Ella lo necesita, tiene 20 minutos de descanso— alzaste tu mirada al escuchar esa voz que estabas acostumbrada a escuchar todos los días
Jin te cargó y te llevó afuera en dónde las camionetas estaban estacionadas, te sentó en una banqueta y antes de que el se sentara a tu lado te pusiste de pie y lo abrazaste
—Te regañaría por el hecho de que estas aquí pero no soy tu novia y no tengo fuerzas para eso
—Estoy aquí por ti, porque quiero que volvamos a estar juntos
Lo miraste a los ojos, el limpió algunas lágrimas con una bella sonrisa, suspiraste un poco aliviada
—¿Qué pasó ahí jagi?, ¿estás comiendo bien?
—Extraño tu comida— eso lo hizo reír, tomó tu rostro y dejó un suave beso en tus labios
—Y yo extrañaba cocinarte— te volvió a abrazar, esta vez el hundió su cabeza en tu hombro— te extraño y te necesito, eres todo para mí y no me importaba cruzar todo el mundo por verte
