- ¿Viste a Harry antes de irte? - preguntó, ignorando por completo el tema de conversación.

- Si, ya estaba dormido cuando pasé. Me sorprendió que durante estos días esté tan precavido con su herida, se nota que quiere sanar pronto.

- Si, si que quiere - respondió intentando ocultar su sonrisa mordiéndose el labio inferior.

La cena transcurrió relativamente normal, Lilian hacía todo lo posible para recibir la atención de su esposo, sin embargo este siempre sacaba el tema de su trabajo, más específicamente sobre Styles, y ya le estaba comenzando a doler la cabeza sólo con oír el nombre de aquel hombre el cuál Louis había odiado en un pasado.

- ¿Louis? - preguntó la rubia mientras se limpiaba la boca con una servilleta mientras terminaba de pasarse la lasaña que estaba cenando.

- ¿Si?

- ¿Podemos hablar de otra cosa cariño? Desde que llegaron los nuevos pacientes al hospital no has dejado de hablar de Harry.

- ¿Y por qué te molesta que hable sobre eso? -preguntó con tranquilidad, haciendo contacto visual con ella por primera vez en la noche.

- Ya ni siquiera me hablas Louis - explotó de repente la mujer intentando no hacer una escena - No me prestas atención desde que el puto asesino está en el Wahnsinn - expresó entre dientes.

- ¡No le digas así Lilian! - Louis se paró enseguida de la mesa, pegando un fuerte estruendo al mover sus cubiertos con el repentino movimiento que asustó a todos en la cena - ¡No quiero que te vuelvas a referir así de él!

- ¿O qué? ¡¿Acaso no lo es?! ¡Dime Louis! ¡Ilumíname! - Lilian se paró de igual manera, quedando frente a frente con el castaño.

- Nos vamos a casa - expresó con seriedad, intentando evadir las miradas fulminantes de las familias de sus amigos.

Louis tomó a Lilian del codo intentando no ser brusco, pero el enojo le desbordaba por el rostro. Se despidió de Liam y Maya con completa seriedad y entró al auto esperando a que la mujer subiera junto con él.

El camino a casa fue agrio e irritante. Louis estaba furioso por haber escuchado aquello salir de la boca de Lilian y no quería siquiera voltearla a ver, sólo empuñaba sus manos con fuerza mientras tomaba el volante, y pudo oír unos leves sollozos por parte de su mujer. No podía continuar con esta farsa, estaba harto de pretender que la quería. Necesitaba terminar con eso en ese instante.

Louis salió del auto en cuanto llegaron a casa y conforme se alejaba del auto escuchó como el llanto de Lilian sólo aumentaba, sin embargo ella bajó un poco después que él y lo siguió en lo bajo.

- Siéntate - expresó con el rostro levantado, señalando los sillones. Lilian no protestó y se sentó en uno de ellos. Louis le siguió el paso, sentándose en el sillón de enfrente - necesito decirte algo - Lilian sólo asintió mientras se sorbía la nariz para intentar dejar de sollozar - ya no te amo Lilian, hace tiempo que ya no lo hago - su voz se quebró - y sé que es difícil pero tienes que aceptar que ya no funcionamos.

- Yo... yo si te amo Louis. Podemos seguir intentando, podemos trabajar en lo nuestro...

- ¡Es que no lo entiendes Lilian! ¡No te amo! - Louis se paró del sillón.

- ¡¿Qué hice para que no me amaras?!

- ¡Nada! Y ese es el puto problema... es que nunca te amé.

- Conociste a alguien, eso fue lo que pasó, ¿Cierto? - Lilian intentaba con todas sus fuerzas intentar encontrar la razón por la cuál Louis cambió de postura con ella - Caroline... es ella, te acostaste con ella.

9 REGLAS (L. S.)Where stories live. Discover now