Cuatro.

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"Un nuevo comienzo"

—¡Michael! –grité pareciendo una lunática acercándome al él–

—Pequeña! –correspondió mi abrazo rápidamente– vine a verte, y de paso a aquel chico de quien siempre hablas.

—Y tu ¿Desde cuándo te interesa? –pregunté divertida levantando una ceja–

—Desde que volví de mi largo viaje esperando ver a mi hermanita en casa recibiéndome y lo único que vi fue un cartel de "Bienvenido Michael" –respondió bromeando–

—Ya, lo siento. Te espere pero luego mamá y papá dijeron que tenían algo que hacer ya que tu vuelo se retraso por lo que decidí aprovechar y venir aquí. –respondí moviendo mis manos al explicar todo. Cosa que siempre hago cuando estoy nerviosa.–

—Bien ya estoy aquí. ¿Vamos? –solo logré asentir y voltear para guiarlo–

Llegamos a la ya muy conocida habitación, dude unos segundos si abrir la puerta o no, pero finalmente abrí dejando pasar primero a mi hermano y luego yo cerrando la puerta tras de mí.

—Volví –respondí levantando la vista encontrándome solo con unos ojos azules ya que el otro integrante en la habitación tenía la cabeza gacha.

—Veo que volviste con compañía –sonrió en dirección a Michael pero disimuladamente haciéndome señas que mirara a su querido amigo, pero antes de poder voltear hacia Justin, este ya se había levantado furioso dejando así la habitación y a todos confundidos.

—Vuelvo enseguida, Ryan quédate con mi hermano quieres? –Pregunté aún con mi mirada en la puerta–

—Espera, ¿hermano? –preguntó entre sorprendido y confundido–

—Michael es mi hermano.

—Creo que deberías decirle eso a Justin –se acerco susurrándome las palabras en el oído con disimulo. Asentí.–

—Ahora regreso –dije volteando mi mirada a mi hermano quien estaba ajeno a la tención de la habitación. Solo pude asentir.

Al salir comencé a buscar por donde Justin se había ido cuando al final lo encontré fuera sentado en una banca. Nuestra banca. Me acerque despacio hacia él pero ni se inmuto.

—¿Porque saliste así? –Pregunté tomando haciendo a su lado–

—Que haces aquí? ¿No deberías estar allí dentro con ese tal Michael? –preguntó entre dientes y con su mandíbula notablemente apretada–

— ¿Pero es que no te quedo claro que a quien quiero es a ti? ¿Acaso estas celoso? –pregunté lo último divertida–

- ¿Debería estarlo? Que yo recuerde nosotros no somos nada –contestó bruscamente haciendo que mi corazón parara por unos segundos al escuchar las últimas palabras de chico frente a mi–

Él tenía razón, nosotros no éramos nada y aunque doliera era la maldita realidad. Él jamás había hecho la pregunta.

—¿Sabes qué? tienes razón –murmure levantándome del banco lista para retomar mi camino hacia la sala y buscar a mi hermano para irnos. Pero de de un momento a otro él me agarro de la cintura sentándome en su regazo–

—No fue lo que quise decir, maldición es solo que –lo interrumpí resaltando lo obvio–

—Estas celoso -Afirme-

-Demasiado –contesto velozmente mientras manteníamos contacto visual–

Le levante el mentón agarrando su rostro con mis dos péquelas manos y lo bese lentamente hasta que el me siguió el beso sujetándome de la cintura. Luego de unos segundos me separe de él mirándolo a los ojos.

Amor Ciego |Justin Bieber|Where stories live. Discover now