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"Tal vez si me acueste boca abajo durante el tiempo suficiente, toda la sangre se apresurará en mi cabeza y pueda morir." Dijo Michael, dejando escapar un suspiro.

Era sábado por la tarde y Michael se había apoderado de la mañana, después de que le envié un mensaje y le dije que no tenía nada que hacer en todo el día ya que estaba aburrida y solitaria. Actualmente, estábamos tumbados boca abajo en el borde de mi cama, con la cabeza tocando el suelo, mientras discutíamos lo mucho que nuestras vidas apestaban.

"No creo que vayas a morir." Me reí, "Estoy bastante segura de que acaba de pasar un buen tiempo y aún sigues vivo."

"Maldita sea." Michael volvió a suspirar.

"¿Tienes hambre?" Le pregunté, poniéndome un poco ansiosa. Ni siquiera podía recordar el tiempo en que llevábamos acostados así, y parecía que los dos duramos horas observando la pared de la habitación.

"No."

"¿Tienes sed?" Pregunté. Michael se rió en voz alta y sacó su teléfono fuera, los dedos tecleando la pantalla mientras continuaba colgando boca abajo.

"Estoy cansado." Respondió finalmente.

"Yo también." Estuve de acuerdo, porque era cierto. No había dormido mucho la noche anterior, porque a pesar de que ya habían pasado unos días desde mi encuentro con Ashton la noche me eligió para realmente pensar en ello. Y mis pensamientos me mantuvieron despierta hasta la madrugada, así que cuando finalmente me quedé dormida fue prácticamente la misma hora en que me levanté de nuevo.

"En serio, no he dormido en casi dos semanas." Michael dijo, sin dejar de reír ligeramente mientras dejaba que su teléfono cayera al suelo delante de su rostro, mirando mientras esperaba una respuesta a cualquier texto que había acabado de enviar.

"¿Por qué?" Cuestioné.

"Pesadillas." Michael respondió en voz baja. "Tengo un montón de pesadillas y sueños recurrentes."

"Oh." Asentí con la cabeza lo mejor que pude mientras me sentaba bien. Quería preguntarle más acerca de las pesadillas a Michael, pero no quería incomodarlo, así que me quedé en silencio.

"En su mayoría son flashbacks. Retrocesos realmente vivos. Tomo medicinas por ella, aunque a veces no las tomo." Se encogió de hombros.

"Estoy segura de que si tomas los medicamentos, tendrías un sueño mejor en las noches." Dije, sólo como una sugerencia. Yo no iba a obligar a Michael a tomar el medicamento cuando él no quería, porque no era mi lugar obligarlo a hacer algo así, pero yo sabía que se sentiría mucho mejor si él escuchara a sus médicos y se tomara los medicamentos que le prescribieron.

"A veces son buenos flashbacks, y no quiero perdérmelo." Dijo Michael, viendo su teléfono una vez más.

"¿A qué te refieres?" Pregunté.

"Que... A veces son recuerdos de hace unos años. Cuando vivía con Ashton y mi hermana y su papá no me odiaba tanto y nada era tan malo cómo lo es ahora." Michael explicó.

"Oh." Asentí, jugando con las puntas de mi cabello.

"Ahora Ashton probablemente me odia también, no lo sé." Michael suspiró, "Ya ni siquiera quiere tratar de hablar conmigo."

"Supongo que es en una parte mi culpa." Me reí nerviosamente, deseando que mi comentario no empiece otra discusión. Acababa de recuperar a Michael, no podía soportar perderlo otra vez por algo estúpido cómo esto.

"Es culpa de los dos - Todo es nuestra culpa." Michael se corrigió. Dejó de mirar su teléfono otra vez, viéndolo cada algunos segundos, la expresión de su cara mostraba que estaba preocupado y un poco ansioso.

7:15 Ashton IrwinWhere stories live. Discover now